La Fundación Excelentia ha conseguido plantar cara a la crisis ampliando su oferta musical con nuevas y originales propuestas, que la convierten en un modelo alternativo al “star system” convencional. A la tercera edición de su Serie Grandes Clásicos, hay que sumar esta temporada otros ciclos musicales como Espacio de Cámara, Espacio Barroco o los Excelentia Proms, con los que amplía la actividad musical madrileña. Sus agrupaciones estables, la Orquesta Clásica Santa Cecilia, el European Royal Ensemble y la Sociedad Coral Excelentia de Madrid, siguen creciendo y renovando sus plantillas, al tiempo que nacen otras nuevas con las que apoyar la formación de nuestros jóvenes músicos y aumentar su actividad concertística, como la Orquesta Escuela Americana de Madrid o la Excelentia World Union Orchestra (EWUO), que hará su debut el próximo 29 de mayo, en el Auditorio Nacional, con la Novena de Beethoven. Y su Proyecto Pedagógico se fortalece con un interesante programa de conferencias, cursos y conciertos didácticos que siguen figurando entre las prioridades de la Fundación. El secreto de su éxito no es otro que facilitar el acceso del gran público al repertorio clásico con programas musicales de calidad, interpretados por artistas de primera fila, a precios asequibles a todos los bolsillos. En esta línea, ha conseguido fidelizar a un elevado número de abonados que crece año tras año, a pesar de que el consumo cultural ha caído considerablemente en los últimos meses a causa de los recortes y de la injusta subida del IVA.
De todo ello nos habla Javier Martí Corral, presidente de la Fundación Excelentia y artífice de todas estas interesantes iniciativas.
Doce son los conciertos que conforman el Ciclo Serie Grandes Clásicos para la presente temporada. ¿Qué criterios artísticos se han seguido para programar el ciclo?
Los criterios básicos para la programación del ciclo han sido, por un lado, garantizar fundamentalmente la calidad musical de los conciertos a través de buenos músicos, directores y solistas; y, por otro, abarcar un repertorio que sea del agrado del gran público, sin olvidar, las obras menos conocidas de los grandes compositores. Nuestra prioridad es satisfacer las necesidades del público ya existente, además de abrirnos a nuevos públicos que se acercan a la música clásica. En definitiva, nuestro principal objetivo es la difusión de la música de calidad y que el público descubra las grandes obras del repertorio clásico. No obstante, también trabajamos en la difusión de la nueva música, creada por compositores tanto sinfónicos como corales de nuestros días, a los que vamos incorporando en nuestra programación, pero siempre bajo los parámetros de la máxima excelencia y la cercanía al público.
El ciclo llega ahora al ecuador ¿Cuál es el balance?
El balance es extraordinariamente positivo. Los jóvenes talentos que triunfan en el panorama musical internacional se conjugan perfectamente con los grandes nombres ya consolidados y, entre ambos, conforman unos conciertos muy especiales, en los que se unen la experiencia de unos, con la juventud y el entusiasmo de los otros, lo que hace que la música fluya y se transmita al público con una energía muy especial. Y así lo confirman los magníficos resultados artísticos obtenidos. Comenzamos el pasado septiembre, con un aplaudidísimo monográfico Mozart, a cargo de la Sociedad Coral Excelentia de Madrid y la Orquesta Santa Cecilia, todos ellos a las órdenes del gran maestro húngaro János Kovács, que es toda una garantía. En octubre, un director muy querido por nuestros abonados George Pehlivanian dirigió a la Orquesta Filarmónica Excelentia en un programa dedicado a Beethoven, integrado, entre otras, por el Concierto para piano n. 5, “Emperador”, con el jovencísimo pianista italiano, de 12 años, Matteo Giuliani, que tanto está dando que hablar. Cristóbal Soler volvió con gran éxito al podio de la Orquesta Clásica Santa Cecilia, con dos programas de esos que hacen afición: en noviembre, con Aida de Verdi en versión de concierto, y en diciembre, con una gala de zarzuela. La actuación de Judith Jáuregui como solista en las Noches en los jardines de España, a las órdenes del director mexicano Héctor Guzmán, ha sido, sin duda, uno de los conciertos de la temporada; sin olvidar, el programa de Año Nuevo, “Una tarde con Strauss”, con un magnífico Donato Cabrera en el podio.
Y todavía quedan otras tantas grandes citas sinfónicas por llegar. El próximo 21 de febrero, un especialista como Bart Vandewege dirigirá La pasión según San Juan, de Bach; el 20 de marzo, Thomas Sanderling nos traerá su personal versión del Requiem, de Verdi; el 18 de abril, Michail Jurowski dirige un monográfico Brahms, en el que participa Renaud Capuçon como solista de lujo; para cerrar en mayo, con dos interesantes programas: la Sinfonía concertante, de Mozart, y la Tercera de Beethoven, con uno de los talentos emergentes de la dirección actual, el norirlandés Courtney Lewis; y, como broche final de la temporada, el 29 de mayo, una obra maestra del repertorio, la Novena de Beethoven, dirigida por Jean-Jacques Kantorow. De todas formas, invito a consultar toda nuestra programación en nuestra web www.fundacionexcelentia.org
Plantarle cara a la crisis con 12 conciertos de alto nivel artístico es difícil en un momento en que, además, en el madrileño Auditorio Nacional han desembarcado nuevos ciclos con interesantes programaciones. ¿Qué ofrecen los ciclos de la Fundación Excelentia que les convierte en un modelo alternativo?
En primer lugar, ofrecemos un modelo de gestión privada de la música clásica de calidad y máximo rigor musical, que es uno de los aspectos que más aprecia nuestro público. En efecto, competir con los grandes ciclos no es fácil pero, sin embargo, hemos encontrado un hueco en el mercado musical que satisface a un público fiel que busca buenos programas musicales a un precio muy razonable. Además, nuestra labor es descubrir nuevos talentos y demostrar en cada concierto que estamos al nivel de las grandes programaciones. Este trabajo exige un compromiso constante de búsqueda de artistas, pero que se ve ampliamente recompensado con la respuesta del público. Nuestros abonados confían en la marca “Fundación Excelentia”, lo asocian a conciertos de calidad y por eso repiten. La fidelización de los abonados, en tiempos en que el consumo cultural está descendiendo tanto a causa de los recortes, es uno de nuestros principales objetivos. Por eso, nuestra programación está muy atenta a las necesidades del público. Conscientes de que nos debemos a nuestros abonados, les tratamos como parte fundamental de la Fundación Excelentia, se sienten implicados en todas nuestras actividades y participan en todas ellas, ya sean conferencias, conciertos didácticos, etc. Al mismo tiempo, vamos incorporando música menos conocida, pero que tiene tanto o más interés que la música “conocida” o de repertorio, e incluso estrenos porque nuestro deber es también difundir las creaciones actuales. Sabemos que en todas las épocas se consume cultura, lo que cambia es la manera de hacerlo y hay que adaptarse en cada época a las nuevas formas de consumir música clásica, con propuestas artísticas de máxima calidad.
¿Cómo les ha influido la injusta subida del IVA a la cultura?
La subida del IVA perjudica el consumo cultural y por eso hay que ser más creativos que nunca. Nosotros no hemos subido el precio de las entradas por lo que, evidentemente, hay que invertir más esfuerzos en publicidad para llegar a más aficionados y compensar así el descenso de público en los conciertos. Esto es lo que nos ha impulsado a crear un Miniabono para aquellos que no pudieron adquirir el abono completo en su momento, pero que a día de hoy quieren asistir al resto de los conciertos de la Serie Grandes Clásicos. Desde nuestro modelo de gestión privada de la música, para el que no recibimos subvención pública alguna, cada proyecto debe ser rentable por sí mismo, por lo que siempre hemos luchado por ajustar los cachets de los artistas. Quizás ahora son más comprensivos y adaptan sus honorarios lo máximo posible para colaborar tanto con las instituciones públicas como con las privadas.
Uno de los conciertos clave de esta temporada es el que protagonizará Michail Jurowski, al frente de la Orquesta Clásica Santa Cecilia, con Renaud Capuçon (portada de nuestra revista) como solista.
El concierto del 18 de abril quizás sea la joya de la corona del Ciclo Serie Grandes Clásicos 12/13. Contar con dos artistas de la talla musical de Michail Jurowski y Renaud Capuçon supone todo un lujo para los aficionados, que podrán disfrutar de la personalidad de este gran maestro que es Michail Jurowski y de las nuevas aportaciones de este genio del violín que es Renaud Capuçon. El repertorio escogido es otra de las claves del éxito de este concierto, un monográfico Brahms, integrado por el Concierto para violín y orquesta, y su Sinfonía n. 4, dos obras maestras de la historia de la música.
Tras la celebración de su décimo aniversario, con una temporada pasada llena de retos artísticos, ¿en qué momento técnico y artístico se encuentra la Orquesta Clásica Santa Cecilia?
La Orquesta Clásica Santa Cecilia ha pasado a ser ya una referencia musical en nuestro país. Nos hemos ganado la confianza de los grandes maestros y solistas del panorama musical internacional y prueba de ello es que todos ellos desean repetir en cada temporada. Una orquesta privada que ofrece alrededor de 50 conciertos por curso, como la nuestra, es una agrupación estable; y eso se ha traducido con el paso de los años en que sea una orquesta con sonido propio y un estilo muy marcados, además de un modelo de autogestión en nuestro país. Nuestro próximo reto es seguir invitando a artistas de grandísimo nivel internacional, seguir descubriendo nuevos talentos y, con ello, ser más competitivos en este sector musical tan reducido.
La Sociedad Coral Excelentia de Madrid sigue siendo su gran apoyo para abordar obras del repertorio sinfónico-coral.
En la Fundación no olvidamos el repertorio sinfónico-coral y, por eso, apoyamos la labor artística de la Sociedad Coral Excelentia de Madrid como una pieza clave para poder abordar esta parte del repertorio tan importante y ampliar así al máximo nuestra oferta musical. Actualmente lo forman más de 120 coralistas y nos preocupamos por su formación tanto técnica como musical invitando a sus atriles a los mejores maestros del panorama musical internacional, así como a directores de la talla de Bart Vandewege, con quien afrontarán La pasión según San Juan, de Bach, el próximo 21 de febrero.
Dentro del repertorio lírico, es obligado detenernos en la versión de concierto de Aida, a la que antes hacía referencia.
Aida ha sido un gran reto porque era la primera ópera en concierto que programábamos, al tiempo que constituía nuestro particular homenaje a Verdi en el bicentenario de su nacimiento que se conmemora este año. Sin duda, fue una experiencia muy emocionante y grata porque la ópera era un género que no habíamos abordado hasta ahora; y la respuesta no se hizo esperar: una de las más calurosas ovaciones que recuerdo, con un Auditorio Nacional de Música totalmente lleno. Cristóbal Soler supo sacar lo mejor de sí a una Orquesta Santa Cecilia y a un Orfeón Navarro Reverter totalmente entregados. El éxito fue tal que volveremos a repetir en sucesivas temporadas, programando otros títulos operísticos.
Otra novedad es la creación de los Excelentia Proms.
Este proyecto responde a la necesidad de ser muy creativos para hacer frente a estos tiempos de crisis que nos toca vivir. Así, haciendo uso de la imaginación, hemos puesto en marcha este concierto, tomando como modelo los famosos Proms londinenses, que va a estar dedicado a los Grandes Coros de la Música de Cine. Para ello contaremos, el próximo 5 de abril, con un coro de 300 personas que será dirigido por el maestro Benjamin Levi, al cual hemos invitado por primera vez para esta singular y atractiva experiencia. Nuestra intención es ofrecer un modelo similar de concierto cada año, en colaboración con la Sociedad Coral Excelentia de Madrid.
La Fundación Excelentia ha apostado también por el repertorio camerístico con el nuevo Ciclo Espacio de Cámara.
Ciertamente, este año hemos puesto en marcha, en el Auditorio Nacional de Música, el Ciclo Espacio de Cámara que era casi lo único que nos quedaba por atender. Surgió, precisamente, por querer completar nuestra actividad y que nuestros programas no fueran únicamente sinfónicos, de tal manera que enriqueciéramos nuestra oferta musical. Nuestros músicos se sienten muy identificados y motivados con este ciclo porque la música de cámara requiere una atención muy especial y es muy delicada. Hemos querido inaugurarlo a lo grande, con un grupo legendario como el Cuarteto Borodin que, además, hacia tiempo que no actuaba en Madrid. Al Borodin le siguió otra agrupación que ha sido toda una revelación las últimas temporadas, el The New Russian Quartet. El 7 de febrero nos visita el famoso violinista Andrés Cárdenes, exconcertino de la Orquesta Sinfónica de Pittsburg, para hacer Las Cuatro Estaciones de Vivaldi; para cerrar, el 13 de abril, con el Cuarteto Tadioli. El criterio escogido para el repertorio ha sido el mismo que el del Ciclo Serie Grandes Clásicos, es decir, obras de cámara fácilmente reconocibles por el público y estamos muy contentos con los resultados obtenidos hasta ahora. Es un programa que ha sorprendido ya que, poner en marcha un nuevo ciclo de cámara en el Auditorio Nacional en los tiempos que corren, es complicado. Además, los programas los hemos diseñado de tal manera que no se ciñan única y exclusivamente al repertorio camerístico convencional, sino que dentro del Espacio de Cámara tengan cabida otras piezas del repertorio, como El Mesías, de Haendel, para el que se agotaron las entradas el pasado diciembre, o el Magnificat de Bach, en las versiones de nuestras agrupaciones como la Excelentia Choral Academy o el European Royal Ensemble. Nos debemos a las demandas del público y, en este sentido, desde la Fundación Excelentia seguimos innovando con nuevas iniciativas, como la creación del nuevo Espacio Barroco, que nace en respuesta a la gran demanda de la música antigua y barroca.
También están en proceso la creación de dos nuevas agrupaciones, la Orquesta Escuela Americana de Madrid y la Excelentia World Union Orchestra (EWUO).
Una de las preocupaciones y fines de la Fundación Excelentia es la formación musical. Para ello, estamos en pleno proceso de creación de la Orquesta Escuela Americana de Madrid, una iniciativa en la que pueden participar jóvenes músicos que hayan finalizado sus estudios superiores o los estén terminando. Sus integrantes participarán en una serie de encuentros musicales en los que perfeccionarán su técnica y ampliarán su repertorio, trabajando junto a directores y solistas procedentes de Estados Unidos. La Excelentia World Union Orchestra es una formación integrada por músicos de las orquestas más prestigiosas del mundo, como las Sinfónicas de Boston y Chicago, la New York Philarmonic, la Viena Philarmonic… y nuestra Orquesta Clásica Santa Cecilia. Se trata de reunir en un solo concierto, en el Auditorio Nacional, a algunos de los instrumentistas más destacados de estas agrupaciones internacionales. Este año hemos invitado al prestigioso Vesko Eschkenazy, concertino de la Orquesta Concertgebouw de Ámsterdam, que participará en la Novena de Beethoven que pondrá broche de oro a la temporada, con el maestro Jean-Jacques Kantorow en el podio. Creemos que, de esta manera, los músicos de nuestra orquesta se sienten más motivados e ilusionados, al poder compartir atril y conocimientos con otros músicos de otros lugares del mundo.
La formación y creación de nuevos públicos sigue estando entre las prioridades de la Fundación Excelentia.
Difundir la música clásica y apoyar su conocimiento en profundidad son los objetivos fundamentales de nuestro Proyecto Pedagógico. Para ello, hemos puesto en marcha un amplio programa educativo, que incluye distintas actividades como conferencias, cursos, conciertos didácticos y en familia, etc. De forma paralela a la Serie Grandes Clásicos, organizamos un ciclo de conferencias, en la Fundación Lázaro Galdiano, en las que se analizan las obras que el público podrá escuchar en el próximo concierto del ciclo. Son impartidas por destacados críticos musicales que analizan, desde distintos puntos de vista, el repertorio de cada programa. Las explicaciones son ilustradas con imágenes y audiciones, lo que permite a los aficionados disfrutar de forma más completa de nuestros conciertos. El público agradece estas conferencias y acuden al Auditorio con mucho más entusiasmo. Nuestros cursos de Historia de la Música y los conciertos didácticos y en familia (como el de “Música de cine”, que celebramos con éxito el pasado 1 de diciembre) también están entre nuestras prioridades. En estos programas participan las agrupaciones estables de la Fundación Excelentia, la Orquesta Clásica Santa Cecilia, el European Royal Ensemble y la Sociedad Coral Excelentia de Madrid, lo que da una muestra de la flexibilidad estructural de estas agrupaciones, que pueden afrontar cualquier proyecto artístico en muy poco tiempo. Desde la Fundación tratamos de poner en marcha todos los mecanismos para que la música clásica atraiga a nuevos públicos. Es un proceso lento, que dará sus frutos.
Tras tres temporadas al frente de la Fundación Excelentia, ¿qué nuevos retos se plantea de cara a la próxima temporada?
Nuestro balance es gratamente positivo. Vemos cómo el número de nuestros abonados crece año tras año. La Fundación Excelentia nunca ha recibido ninguna subvención pública por lo que siempre hemos estado forzados a rentabilizar cada concierto y cada actividad al máximo. Por ello, la crisis no nos ha cogido por sorpresa y nos ha permitido seguir un camino exclusivamente de gestión privada. Nuestro reto para la próxima temporada es seguir creciendo, esforzándonos para que el público siga confiando en nuestros ciclos. Para ello, continuaremos invitando a grandes solistas y directores, y trataremos de expandir nuestros conciertos más allá de Madrid, a otros auditorios españoles para que puedan aprovechar todo nuestro potencial artístico. Son más de 50 conciertos los que ofrecemos en una temporada, una interesante oferta musical que debe rentabilizarse al máximo. Por eso, animo a los gerentes de nuestros auditorios a que se pongan en contacto con nosotros y aprovechen nuestros magníficos programas para incrementar la oferta musical de sus ciudades.
Entrevista realizada por: Elena Trujillo Hervás
Ciclo Excelentia
Serie Grandes Clásicos
La Excelentia Choral Academy,
una de las agrupaciones de la Fundación Excelentia.
21 de febrero de 2013
19:30 horas
EXCELENTIA CHORAL ACADEMY
CORO DE LA ORQUESTA SANTA CECILIA
ORQUESTA CLÁSICA SANTA CECILIA
Director: Bart Vandewege
Bach: La pasión según San Juan
20 de marzo de 2013
19:30 horas
SOCIEDAD CORAL EXCELENTIA DE MADRID
ORQUESTA CLÁSICA SANTA CECILIA
Director: Thomas Sanderling
Verdi: Requiem
18 de abril de 2013
19:30 horas
ORQUESTA CLÁSICA SANTA CECILIA
Director: Michail Jurowski
Violín: Renaud Capuçon
Brahms: Concierto para violín y orquesta
Brahms: Sinfonía n. 4
22 de mayo de 2013
19:30 horas
ORQUESTA CLÁSICA SANTA CECILIA
Director: Courtney Lewis
Mozart: Sinfonía concertante
Beethoven: Sinfonía n. 3
29 de mayo de 2013
19:30 horas
SOCIEDAD CORAL EXCELENTIA DE MADRID
EXCELENTIA WORLD UNION ORCHESTRA
Director: Jean-Jacques Kantorow
Beethoven: Sinfonía n. 9
El violín mágico de Renaud Capuçon
en la Fundación Excelentia
Como hemos leído hasta ahora, la presencia de Renaud Capuçon, un violinista llamado a hacer historia, como estrella incomparable dentro de la programación de la Fundación Excelentia, es, sin lugar a dudas, uno de los momentos estelares de la programación musical madrileña en 2013. El todavía joven violinista (Chambéry, 1976) actuará junto a la Orquesta Clásica Santa Cecilia, agrupación sinfónica estable de la Fundación Excelentia, bajo la dirección de otro nombre importante de la dirección orquestal, el director moscovita Michail Jurowski. El programa será un monográfico dedicado a Johannes Brahms, con dos de las obras más grandes salidas de la pluma del hamburgués, el Concierto para violín y orquesta y la Sinfonía n. 4, músicas que se asocian directamente al Brahms de la gran y espesa barba blanca, al Brahms de la contundente densidad emocional y expresiva. No es una casualidad que Capuçon haya elegido este monumental Concierto, ya que acaba de grabarlo junto a Daniel Harding (puede leerse la crítica de Luis Gago en la sección de crítica discográfica en este mismo número). El tándem Capuçon-Jurowski puede dejar en la memoria del aficionado una de las grandes versiones de la obra que se hayan escuchado en los últimos años.
La extraordinaria musicalidad de Capuçon, que recuerda en cierto modo a las de otros prodigiosos violinistas, como Itzhak Perlman y Gil Shaham, lo ha convertido en uno de los grandes. La discografía del francés, ligada al sello Emi, es muy completa, de la que hemos escogido una selección en el recuadro contiguo. Como una bomba fue su aparición en el Concierto para violín “L’Arbre des songes” de Dutilleux, junto a Myung-Whun Chung, sin duda la versión de referencia de la mágica obra. Otros registros que son admirables incluyen la música de cámara de Fauré (como en tantos otros discos, junto a su hermano Gautier, entre otros intérpretes) y la música de cámara de Brahms (Tríos, Cuartetos con piano, Sonatas, Quinteto con clarinete), una música con la que se siente especialmente vinculado, como también puede comprobarse en su versión del Doble Concierto, también junto a Gautier y Chung.
Otros espléndidos registros son el dedicado al Concierto de Korngold (especialmente atinado para Capuçon, que sobrevuela en su delicado registro agudo con una facilidad deslumbrante), que se presenta junto al titán del de Beethoven, ambos con la dirección de Nézet-Séguin. Para completar la discografía de Capuçon, conviene recordar sus colaboraciones con los pianistas Nicholas Angelich, Martha Argerich o Frank Braley.
Gonzalo Pérez Chamorro
Discografía seleccionada
BERG, BRAHMS: Conciertos para violín. Orquesta Filarmónica de Viena / Daniel Harding. Virgin, 5099960265357.
BRAHMS: Doble Concierto. Quinteto con clarinete. Filarmónica de Radio France / Myung-Whun Chung. Virgin, 0094639514724.
DUTILLEUX: Concierto para violín (+ Concierto cello). Orq. Filarmónica de Radio France / Myung-Whun Chung. Virgin, 0724354550225.
FAURÉ: Música de cámara. Renaud Capuçon, violín. Varios intérpretes. Virgin, 5099907087523. 5 CDs
KORNGOLD, BEETHOVEN: Conciertos para violín. Orq. Filarmónica de Rotterdam / Yannick Nézet-Séguin. Virgin, 5099969458903.