Acabamos de regresar de la Feria de la Música de Frankfurt. En los primeros días de febrero se celebró en Cannes una edición más de la veterana Feria de la Música y del Disco (MIDEM). Y en el próximo mes de mayo tenemos una cita en Viena para asistir a las ferias profesionales Classical:NEXT y Music Market.

El MIDEM volvió a constatar la deriva del sector discográfico en el mundo de la distribución digital y de los servicios editoriales “online”. Muy pocas empresas del  disco clásico estuvieron presentes en Cannes. Está claro que estas buscan foros más específicos para su realidad cultural y comercial. Las actividades principales de la edición de este año, 2014, se centraron nuevamente en la presentación de ponencias y mesas de trabajo sobre el convulso, y todavía no bien definido, espacio discográfico digital. Y se mostraron resultados que apuntan hacia un significativo crecimiento del consumo de grabaciones musicales “online”, bajo parámetros legales. Primera buena noticia para incitar al optimismo cultural.

La Feria de la Música de Frankfurt ha tenido dos apartados: MusikMesse, en donde hemos encontrado todas las grandes y pequeñas marcas de instrumentos musicales, y Prolight+Sound, reservado para el sonido y la iluminación profesional (muy en vanguardia en las actuales artes escénicas). La feria de Frankfurt siempre ha tenido una importancia capital para los profesionales del comercio musical. Las más destacas empresas de instrumentos musicales, luminotécnica y sonido se dan cita cada año en la ciudad del Main para presentar sus amplísimos catálogos, servicios y novedades. En Frankfurt estaban todos; las grandes marcas, las pequeñas, sus distribuidores de todo el mundo, los músicos, los empresarios más destacados y, por supuesto, un gran número de aficionados. La dirección de la Feria nos ha explicado que la edición de 2014 ha tenido un importante crecimiento, de manera que, sorpresivamente, las visitas de empresas y profesionales de España han crecido, por primera vez en los últimos años. Segunda buena noticia para el optimismo cultural.

El visitante a la Feria de la Música de Frankfurt queda siempre muy sorprendido por la inmensa oferta de productos y servicios que se promocionan en sus “stands”, organizada en miles y miles de metros cuadrados, divididos en diversos pabellones monográficos. Los pianos, los instrumentos de viento, los de cuerda, la percusión, el sonido profesional con sus increíbles avances digitales, los espectaculares sistemas de iluminación, imagen y tecnología mecánica “computerizada” para el montaje escénico; todo un torrente de creaciones, soluciones y servicios profesionales que están haciendo posible, de la mano de la más refinada y avanzada tecnología, unos niveles artísticos nunca antes conocidos en el sector de la música y el espectáculo. Y van ya tres noticias para el optimismo cultural.

El próximo mes de mayo se presenta, esta vez en Viena, una nueva edición de dos jóvenes e importantes ferias, exclusivas para la música clásica: Classical:NEXT y Music Market. En una semana de trabajo, productores, editores, músicos, distribuidores, agentes de conciertos, orquestas, teatros, etc., se reúnen para mostrar proyectos, nuevas programaciones, cambiar impresiones, realizar ponencias, hacer negocio, en definitiva. Classical:NEXT se ha consolidado como la feria de referencia para el sector profesional de la música clásica. Sus organizadores nos informan de que ha tenido un crecimiento de más del 30% en la reserva de espacios para este año 2014. Y más de 350 empresas de más de 30 países ya han confirmado su participación en el recinto vienés del MAK (Museo Austriaco de Artes Aplicadas). Nueva buena noticia (¡ya cuatro!) para el optimismo cultural.

Music Market congrega también en Viena, dos días antes de Classical:NEXT, a los principales sellos discográficos independientes de música clásica para que muestren sus catálogos y sus novedades de cara a la temporada 2014/2015. Esta feria es un punto de encuentro profesional entre las discográficas y sus distribuidores a nivel mundial. Y el anfitrión de este evento no podía ser otro que el grupo Naxos, pues en los últimos años ha extendido sus actividades hacia la distribución de producto físico y digital para terceras compañías audiovisuales del sector clásico. Actualmente Naxos ofrece estos servicios a más de 650 sellos independientes, dentro de una economía de escala basada en la optimización de los recursos. Así, se ha podido asegurar la presencia internacional de pequeños grandes catálogos de música clásica a los que, sin participar de tal novedosa estructura comercial, les hubiese sido muy difícil acceder a los mercados globales con unos mínimos de rentabilidad económica. Y van cinco buenas noticias para el optimismo cultural.

Así pues, está claro que la apuesta internacional por la música y la cultura es optimista; que los países y las empresas del mundo civilizado siguen creyendo en la cultura como elemento de riqueza, estímulo y cohesión social. Esperemos que España cambie su rumbo oficial para la cultura y entre de lleno en ese optimismo cultural del mundo civilizado.