En este verano de 2022 volverán a llenarse de excelente música todos los rincones del país, con sus numerosos festivales y programaciones estivales en teatros y auditorios, todo ello con sugerentes e imaginativas propuestas que nos hacen dejar atrás los titubeos vividos en los pasados dos años de turbulencias, acudiendo sin reservas a los numerosos y espectaculares enclaves que este país ofrece para el turismo cultural, un turismo nacional e internacional que sigue contribuyendo con importantes cantidades de dinero a nuestra balanza comercial.
Podríamos afirmar que en el final de la temporada 2021/22 se confirma su éxito a nivel nacional, pues los amantes de la música han podido reincorporarse sin restricciones a los distintos espectáculos y ofertas musicales en cartel. Los datos de audiencia, a los largo de la temporada que termina, cubren con creces las expectativas más optimistas de los organizadores, ya sean instituciones públicas o privadas. Ni siquiera la posible desestabilización por la guerra de Ucrania, en los últimos meses, ha traído sombras de reducción de la oferta musical ni de sus espectadores. Parece como si la música y la cultura en España se hubiesen impuesto como una necesidad vital de la sociedad actual, pronóstico que desde esta página venimos manifestando sin reparos.
Por otro lado, el sector editorial ha lanzado al mercado, durante la temporada que ha llegado a su fin, un significativo número de novedades bibliográficas de temática musical, muy bien recibidas por los lectores. Es como si estuviésemos viviendo un resurgimiento creativo en el mundo de los libros musicales. Las pequeñas editoriales independientes y los grandes grupos empresariales muestran cada vez más interés en el sector, demostrando que también la literatura musical sobrevive al efecto de Internet, recuperándola con fuerza para el mercado español y latinoamericano.
No queremos olvidarnos de otro pilar importante para la actividad musical, dentro de este pequeño análisis del mercado de final de temporada que nos ocupa, como es el sector discográfico que sigue, contra todo pronóstico, mejorando sus cifras en cuanto al volumen de novedades que se lanzan al mercado cada mes. Sellos independientes españoles hacen historia internacional por la calidad de sus ediciones y la intensidad de sus novedades, descubriendo un nuevo y rico repertorio, dando visibilidad internacional a muchos de nuestros destacados artistas. También, los sellos independientes internacionales mantienen su impresionante ritmo de aportación de novedades, descubriendo nuevos autores y jóvenes intérpretes que esperan su oportunidad. Completan el panorama discográfico las producciones de las multinacionales, que siguen apostando por las grandes estrellas del mercado.
A todo lo anterior habría que sumar la imparable oferta y la creciente audiencia de la música por Internet, que continúa avanzando sin descanso y mejorando sus estándares de calidad día a día. Toda la música grabada, novedades incluidas, está a nuestra disposición a un clic y con tarifas planas. Gran número de los más destacados eventos musicales que se celebran a lo largo del país, así como en el resto del mundo, nos abren sus puertas online y vía streaming sin movernos de casa. La oferta es abrumadora.
Diremos que, arrimando el ascua a nuestra sardina, en estos tiempos de arrolladora oferta musical en vivo y multimedia, la necesidad del consumidor de unos buenos servicios de información, crítica y valoración de dicha oferta, ofrecida por los distintos medios de comunicación especializados, cada vez son más imprescindibles para organizar, de una manera ordenada e inteligente, bajo criterios propios de calidad y selección, todo este torrente musical que el mercado nos presenta. Por ello, sean bien recibidas las publicaciones musicales, los portales Web, las plataformas de distribución digital de programas musicales y las emisoras de radio comprometidas con la mejor selección musical. Bienvenido todo aquello que ayude al amante de la mejor música a un inteligente y documentado acceso a su consumo y disfrute.