Música clásica desde 1929


Un punto de encuentro de actividades musicales con artistas, instituciones y gestores


Sira Hernández

Juego de sombras y luces

Mayo 2020

Sira, su nuevo disco se titula Initiation to the Shadow, que es el nombre de una de las piezas que lo componen. ¿De dónde surge?

Elegí Initiation to the Shadow, en inglés, por salir en un sello internacional, y para diferenciarlo del espectáculo Iniciación a la Sombra, estrenado en 2015. Ese espectáculo, inspirado en el libro del poeta manchego Ángel Crespo, del mismo título, era una performance basada en la improvisación entre el bailarín y coreógrafo Pau Aran y la música al piano que yo iba desarrollando; un continuum entre él y yo, bajo la guía conceptual de la palabra y de los versos de Crespo. Decidí que fuera el título del CD por ser la primera pieza del disco y porqué el concepto de "Sombra" se desarrolla y dibuja a lo largo de las cuatro piezas con diferentes matices. La "Sombra" en Ángel Crespo es el "misterio", lo "oculto", pero trascendente, donde nace la música y lo más sagrado, no es necesariamente algo maligno, mientras en las otras piezas la sombra se carga de oscuridad y dolor.

Se trataba, por tanto, de una serie de improvisaciones. ¿Cómo pasa de improvisar a fijar la música en papel?

Para mí el elemento improvisado en música es esencial, es la inspiración pura. Meter las manos en el agua profunda y en la corriente del río donde circula la música y llevarla a superficie. Sin ello falta algo. Luego llega la intelectualización y el trabajo y oficio que permitirán construir una arquitectura musical más sólida o perdurable por ser más razonada. Pero ese elemento inicial es fundamental, sigo el ejemplo de Bach a Granados, Chopin, Liszt, Schubert y, por supuesto, Mozart o Beethoven. Pasar ese vuelo libre a papel siempre es un trabajo arduo, aunque necesario para transmitirlo y elaborarlo y darle un carácter más definitivo. A veces se sacrifican ideas y otras se elaboran más. Es inacabable. Como decía Borges para la literatura, se acaba de escribir un libro cuando se publica. Y así es.

No todos los artistas dan el paso a la composición. ¿Qué le llevó a hacerlo, continuará haciéndolo?

Llevo componiendo y trabajando la creación musical desde muy joven, desde los 17 años. Mi profesor en el conservatorio de Turín, Felice Quaranta, era también un gran compositor de música contemporánea, y consideraba el jazz una asignatura más; fomentaba también la improvisación y otros géneros. Estudié con Manuel Oltra cuando volví a Barcelona, profundizando en el contrapunto y fuga y las formas más tradicionales. Aunque para mí, la gran escuela es haber tocado mucha música contemporánea, de nuestros compositores actuales, sin olvidar los grandes nombres, Messiaen, Britten, Berio, Mompou, etc. Mi ADN está impregnado de esa música, como tantas otras que oímos y de las que somos hijos hoy en día. Espero poder seguir haciéndolo y, como diría Ángel Crespo, que los Dioses o las Musas sigan cantándome al oído.

La obra que cierra el álbum, Don’t forget about that, gira alrededor de Primo Levi ¿Por qué?

Es un homenaje al gran escritor Primo Levi en el centenario de su nacimiento, en 2019. Levi sobrevivió al terrible genocidio del nazismo, estuvo preso y deportado en Auschwitz. Es un mensaje o un grito, si se quiere ver así, para no olvidar, porque a veces es demasiado fácil caer en el olvido con el paso del tiempo. No debemos olvidar, cómo dijo él, lo que el hombre puede hacer al hombre. Para que nunca más se repita esa terrible y monstruosa página de la historia.

¿Todas sus composiciones tienen un origen literario?

Cierto, muchas lo tienen. La palabra es muy potente como fuente de inspiración y la poesía evoca con suma facilidad imágenes y emociones, sentimientos que traduzco en música, en sonidos. Aunque no siempre es así. La tercera pieza del CD, la Fantasía para piano Sewing Machines, la escribí y estrené en Italia, en un espectáculo con la artista Sara Conforti, sobre el dolor de las mujeres que han sufrido abusos. No hay literatura, solo sonidos casi guturales y el ruido incesante y mecánico de una máquina de coser industrial cosiendo sin parar. Ahora estoy escribiendo música inspirada en este terrible periodo que estamos atravesando, con el Covid-19 amenazando nuestras vidas y confinados en la ausencia del otro. No hay poesía, ni palabra.

¿Lo trascendente, en distintas facetas y aspectos, es el hilo conductor de todo este trabajo?

Sí, hay un hilo conductor, muy sutil, que engarza estas piezas, a través de esta "Sombra", que permite que nos asomemos a regiones donde la Belleza y la Pureza nos salvan y nos redimen, y es allí donde se manifiesta lo que es trascendente. Sin ese espíritu trascendente que mueve y conmueve, para mí nada tendría sentido.

¿Valora la posibilidad de que otros pianistas interpreten su música?

Por supuesto, sería un honor y sería bien grata la interpretación de mis obras por parte de otros músicos. Lo escucharía con humildad y dejando que sus manos y sus duendes vuelen libres, estoy segura de que me sorprendería. Porque nunca nadie es igual a nadie, y la interpretación también entra en el juego de esa libertad que yo anhelo para la composición.

por Blanca Gutiérrez Cardona

http://sirahernandez.com/ 

Canal de YouTube de Sira Hernández:
https://www.youtube.com/channel/UCVCTi4maQBEQnJUd85WL8FA
Enlace al nuevo CD en la Web de Naxos
CD de Sira Hernández
Enlace al nuevo CD en Música Directa
CD de Sira Hernández

455
Anterior Coro Amadeus de Puebla de la Calzada
Siguiente Adolfo Gutiérrez Arenas