Música clásica desde 1929


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Pepe Mompeán

Director del Festival de Arte Sacro de la Comunidad de Madrid

Marzo 2024

Comenzó a trabajar para la Comunidad de Madrid en 2015… ¿En qué situación encontró el entonces Festival de Arte Sacro de la Comunidad de Madrid (FIAS) y qué características vio necesarias cambiar tanto a nivel estructural como a nivel artístico?

Entré en agosto de 2015 en la Dirección General de Promoción Cultural formando parte del equipo de Jaime de los Santos, en aquel momento no existía todavía la Consejería con ese rango administrativo. Lo primero que hice fue realizar un análisis de la situación que me encontraba y de la programación que se realizaba. Las conclusiones fueron claras desde el primer momento, había mucho margen para crecer y ampliar horizontes y la primera oportunidad fue la del Festival de Arte Sacro. El trabajo fue intenso, me reuní prácticamente con todo el sector, principalmente con los músicos. A partir de ahí fui elaborando diferentes documentos de carácter estratégico para ir desarrollando cada una de las líneas de la asesoría de música. El caso del Festival de Arte Sacro no fue diferente, realicé un detallado plan con una serie de recomendaciones que marcaban ya el giro que quería darle a este festival. Un plan que contenía ya los primeros pasos de lo que es hoy el FIAS, sin ninguna duda uno de los festivales más interesantes del circuito musical español. En este documento estaban marcados los pasos a seguir en cada edición, una evolución progresiva que podría resumirse en cuatro conceptos a lo largo de cuatro años: revolución (2016), confirmación (2017), consolidación (2018) y legado (2019). En estos años han estado siempre presentes una serie de cuestiones que son seña de este festival, como la irrenunciable apuesta por la calidad y la imaginación, el apoyo incondicional a los músicos, grupos y compositores españoles, la presentación de programas, repertorios y nombres poco habituales en nuestras salas, la renovación constante de los artistas que integran el cartel del festival cada año sin olvidar una mirada paritaria, el activo trabajo por ampliar nuevos públicos o el equilibrio entre la nueva creación y el trabajo de recuperación de nuestro patrimonio musical.

Usted provenía, sobre todo, del mundo de las exposiciones de arte, antes de comenzar con su cometido en el sector de la música. ¿Cómo fue su acercamiento al mundo musical, y qué es lo que más le atrajo?

Yo estudié Historia y Arqueología en la Universidad Autónoma de Madrid e inicié una tesis sobre semiótica que tuve que dejar cuando se me acabó la beca que tenía; son unos conocimientos que me han servido mucho a lo largo de mi vida profesional. A finales de los años noventa fui dejando mi trabajo como arqueólogo para dedicarme cada vez más a la gestión cultural, alternando diferentes proyectos, desde la dirección de festivales a planes museográficos, comisariado de exposiciones o propuestas de patrocinio cultural. Aunque no tengo una formación musical académica, siempre he disfrutado de una aproximación a este mundo como aficionado y como gestor con una mirada abierta y una curiosidad viva que mantengo todavía hoy.

El sector de la música clásica siente que está en deuda con usted por todos sus logros realizados en sus programaciones y por todo lo que ha podido realizar hasta la fecha. ¿Se siente querido por los artistas, más en concreto por el denominado sector de la música antigua?

Entiendo lo que quiere decir, pero no creo que nadie deba estar en deuda conmigo. Nunca he considerado mi trabajo como algo extraordinario, lo he realizado con esa normalidad de quien asume desde el primer momento cuáles son sus responsabilidades en un puesto público como el que ocupé durante estos últimos ocho años y qué se podía lograr en el ámbito de esas competencias. Tuve la gran suerte de llegar a este cargo en un momento en el que despegaba una generación de músicos asombrosos, en el inicio de una verdadera etapa dorada de la música en España, que sigue sin parar de crecer. Ellos fueron en gran parte los que hicieron más fácil mi trabajo, solamente tenía que escucharlos, valorar su trabajo y darles todas las oportunidades que merecían para acompañarlos en su crecimiento profesional. Es decir, era yo el que debía estar a la altura del sector que me encontraba.

Además del FIAS, ha creado otros festivales y citas culturales de especial relevancia… ¿Cuáles han sido y cómo ha sido su recepción?

En estos años en la Consejería no hemos parado de crear nuevos ciclos de conciertos que se sumaban al FIAS y a Clásicos en Verano, pero fue desde la pandemia cuando pusimos en marcha proyectos para el sector de las músicas actuales como Sesión Vermú o Radar Joven para apoyar a artistas emergentes, agencias independientes y salas de conciertos madrileñas que en ese momento lo estaban pasando francamente mal. En todos estos proyectos nuevos, que han tenido una acogida fantástica, se han aplicado los mismos criterios que he mencionado sobre el FIAS, porque es una línea de trabajo asumida con naturalidad en todas las programaciones que hemos hecho.

¿Se siente igual de valorado por sus superiores que como lo hacen los artistas?

No puedo estar más agradecido por la oportunidad de haber estado estos últimos ocho años en la asesoría de música de la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte de la Comunidad de Madrid, primero con Jaime de los Santos y después con Marta Rivera de la Cruz. Ha sido una etapa muy intensa en la que he aprendido mucho y en la que me he entregado absolutamente, entendiendo desde el primer momento cuál era la responsabilidad de un cargo público con esas competencias.

Resúmanos su situación laboral actual y sus perspectivas de futuro…

Desde septiembre pasado no formo parte de la Consejería, aunque continúo con la dirección artística del FIAS 2024 y la programación del ciclo de conciertos de Escenas de Verano. En los últimos meses he podido descansar bastante y pasar más tiempo con mi hija, algo que realmente necesitaba, porque el volumen de trabajo que pasaba por mí en estos años ha llegado a ser ingente en algunos momentos. 

Siempre he dicho que debería ocupar un cargo del sector a nivel estatal. ¿Se lo ha planteado, o se lo han propuesto alguna vez?

Le agradezco mucho el comentario, pero no es algo que dependa de mí, solamente espero seguir dando lo mejor de mí en los trabajos y nuevas responsabilidades que la vida me ponga por delante en el futuro.

por Simón Andueza

www.madrid.org/fias/2024

Foto: Pepe Mompeán, director artístico del FIAS, con el galardón recibió en 2018 el FIAS a mejor festival.

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