¿Cómo surgió la idea de grabar un nuevo disco con obras pianísticas de Antón García Abril?
En el Concurso Internacional de Piano dedicado a la obra de Antón García Abril de Teruel, el que concursé en el año 2006, y en el que logré el Primer Premio en la edición de 2009, me presente con su obra Microprimaveras (pequeño ciclo de cinco piezas de unos dieciocho minutos de duración), escrita en 2006. Estaba totalmente ilusionada con este ciclo, es una música que me fascina, por eso decidí incluirla en el disco. De hecho, Antón estaba muy emocionado con mi versión de esta obra. De ahí surgió el embrión de la idea para grabar un disco con su música pianística*.
¿La elección de las obras del disco, fue consensuada con el maestro o fue exclusivamente decisión tuya?
Fue una decisión consensuada con el maestro, su Fundación y la casa discográfica Bolamar, junto también, como es lógico, con mi opinión. Aunque la principal razón fue grabar todas las obras pianísticas recientes y, muy especialmente, las que aun no estaban grabadas en disco. Desde este criterio construimos un repertorio de obras recientes y no grabadas, que dio material para dos cedés.
¿Cómo describirías la música de García Abril?
Fue un total descubrimiento para mí la obra para piano de Antón García Abril. En mi opinión, el principal criterio que hay a la hora de acercarse o de interpretar a un compositor nuevo en, este caso, en mi repertorio, es si queda algo nuevo por descubrir que realmente merezca la pena. A primera vista, la música para piano de Antón García Abril es de excelente factura. Curiosamente, en el repertorio para piano, e imagino que en cualquier repertorio de música “seria”, las obras pueden parecer interesantes a primera vista, pero poco a poco que vas introduciéndote en ellas, estudiándolas o escuchándolas en varias ocasiones, comienzas a comprender que hay poco donde “rascar”, que toda la belleza aparente que había a primera vista es puramente superficial. Este criterio asigna en qué estado se quedaría esta música. Pero si al regresar a ella una y otra vez, se descubre algo nuevo, es una música que sobrevivirá al tiempo y siempre estará presente por su incuestionable calidad. Puedo afirmar que la música de Antón García Abril pertenece a este género de músicas que siempre van a perdurar, pasen los años que pasen.
¿Ha colaborado el maestro en el proceso de grabación?
El “planning” de interpretación y grabación fue un trabajo muy especial, en especial en mi caso, ya que fue una búsqueda personal de la intención que quería dar a cada tipo de obra, sin otra participación que la mía. Tuve plena libertad interpretativa; también hay que decir que Antón García Abril depositó en mí toda la confianza posible, algo que no siempre ocurre entre el compositor y su intérprete. Trabajé mucho en las obras para luego realizar la grabación idónea, que la hicimos durante sesiones en 2010 y 2011 en el Teatro Monumental de Madrid, en las que ya sí estuvo presente el maestro.
¿Hay programados algunos conciertos para promover el disco?
La Fundación Antón García Abril tiene programados diversos conciertos y actividades para promover el disco. Actualmente estamos cerrando las fechas de los conciertos. Por otra parte, con motivo del 80º aniversario del compositor, la Fundación tiene programados diversos conciertos con la música del maestro.
¿Qué significa el nombre de García Abril para ti?
Creo que con Antón García Abril se cierra la cadena de grandes músicos clásicos españoles, seguidores de la gran tradición. Personalmente creo que con esta grabación mi vida musical y profesional se ha enriquecido notablemente.
El 80 aniversario de García Abril coincide el mismo año de la edición de este disco. ¿Hay previsto más grabaciones del resto de la obra del maestro, como los Preludios de Mirambel?
Sí, estamos planificando grabar el resto de sus obras para piano. Todo a su tiempo, ya que es una música muy bien escrita y elaborada y no se la puede acometer a la ligera y con prisas. Hay que ir paso a paso.
Pues esperaremos con paciencia esta nueva grabación. Gracias.
Por Gonzalo Pérez Chamorro