José Luis Estellés es uno de nuestros músicos más internacionales, cuya singular y prolífica trayectoria, difícilmente etiquetable, sigue sorprendiéndonos. Al tiempo que su actividad como clarinetista abarca actuaciones como solista, músico de cámara y orquesta con un notable equilibrio entre el repertorio tradicional y la nueva creación, su creciente desempeño como director de orquesta no deja de recibir elogios. Profesor vocacional, ha abierto una importante brecha en la pedagogía del clarinete y de la música de cámara en nuestro país, además de aportar su visión artística en la organización de varias instituciones educativas y eventos musicales. Recientemente ha salido a la venta su CD, grabado junto al Jousia Quartet, dedicado a Mozart y Weber con el sello IBS Classical Gold. A ello dedicamos esta entrevista.
Después de numerosas grabaciones, entre las que abundan las dedicadas al nuevo repertorio o a la recuperación histórica, ¿cómo surge la idea de grabar a Mozart y Weber? ¿Por qué con el Jousia Quartet?
Debería empezar diciendo que para mí la música de cámara representa el núcleo de la actividad musical y de mi crecimiento artístico. Es ahí donde se dan, de manera cruda e íntima, todos los valores que identifican a la música pura. También puedo añadir que el cuarteto de cuerdas es una de mis combinaciones favoritas, y los Quintetos de Mozart y Weber, que son piezas emblemáticas dentro de nuestro repertorio, me han acompañado siempre en mis conciertos, pues los he interpretado con grandes cuartetos desde Japón hasta Estados Unidos, también en Suiza, México, Italia, Alemania, Dinamarca..., por decir unos cuantos países. Fue en Finlandia, tras una actuación muy especial con el Jousia Quartet en la Crusell Week, cuando sentí que me apetecía llevarlo al disco, pues contaba con un conjunto de músicos de clase mundial, destacados en su país, con los que había sentido total comunicación, y además sabía de la voluntad del sello IBS Classical Gold de empezar a trabajar conmigo y realizar esta grabación.
Esta es la primera colaboración con el sello IBS Classical Gold. ¿Qué supone el estreno con un nuevo sello? ¿Cómo fue la grabación?
Trabajar con IBS Classical tiene para mí aspectos muy positivos. Es un sello con vocación internacional que tiene su sede en Granada, ciudad donde resido. Sus responsables son grandes músicos, sensibles a las necesidades artísticas de los intérpretes y a las particularidades del repertorio, con los que además me une una larga relación personal y profesional. Por otra parte, ya conocía tanto la calidad técnica de sus producciones como la dinámica habitual de trabajo en una grabación de estas características, así que lo único nuevo ha sido todo lo referente a la logística y posproducción con ellos. La grabación tuvo un período de preparación (ensayos y concierto) en Helsinki y posteriormente, ya en Granada, la realizamos en la capilla de los Agustinos Recoletos. Creo que esta acústica poco convencional le da una personalidad muy marcada a la grabación, de manera muy congruente al planteamiento estilístico de las obras. También “escucho” el buen ambiente creativo que tuvimos durante las sesiones, pues las grabaciones tienen ese elemento intangible que, queramos o no, siempre aparece.
¿Cómo se valoran las grabaciones anteriores cuando pasa el tiempo? ¿Se puede mencionar algún hito?
En ningún caso un disco define el todo de tu actividad, pero sí queda para siempre como un documento representativo de un momento. Cada uno tiene sus propios hitos, y en mi caso la dualidad clarinetista-director está muy presente. Valoro en su conjunto mis grabaciones interpretando a los autores vivos españoles, tanto con mi primer ensemble, el Grupo Manon, como con grupos más recientes. También como clarinetista me resultan especiales y de recuerdo imborrable mis dos grabaciones con el Orpheus Quartett, incluyendo por supuesto la del Quinteto de Brahms. Entre los años 2006 y 2009 me dediqué tremendamente al desarrollo de la formación orquestal en Musikene (San Sebastián) y como resultado de aquel planteamiento dirigí cuatro CD que dieron a conocer obras de varios compositores, notablemente la recuperación y primera grabación mundial de obras de Charles Bordes, Jesús Guridi y (uno de los acontecimientos musicales de 2009) el estreno y grabación de la ópera Juan José, de Pablo Sorozábal. Recientemente también he dirigido un CD monográfico del compositor Juan José Colomer (Conciertos para metal y orquesta), junto a la Orquesta Ciudad de Granada y estupendos solistas de mi generación como son Luis González, Javier Bonet y el Spanish Brass.
¿Qué representa hoy día grabar un CD para un músico? ¿Hay algún proyecto en el futuro?
Un CD no tiene ya el mismo peso en la carrera de un músico que hace una década, debido a que la industria audiovisual ha cambiado mucho con la revolución tecnológica y las redes sociales. De cualquier forma, grabar es una gran experiencia que te hace crecer en muchos sentidos, y también te ayuda a llegar a más público. Mi próximo proyecto discográfico será también con IBS Classical Gold, y se trata de una recuperación de repertorio español dirigiendo a los miembros del Trío Arbós y la Orquesta Filarmónica de Málaga los Conciertos de violín, cello y piano de Salvador Bacarisse.
Lucas Quirós
http://www.joseluisestelles.com
Foto: El clarinetista y director José Luis Estellés.
Acred: Laura Apolonio