En el atrio del Teatro Comunale de Bolonia, la ciudad más wagneriana de Italia, una placa de bronce recuerda la unión entre el célebre compositor alemán y la ciudad que concedió a Richard Wagner la Ciudadanía de honor y dio a conocer su obra en Italia. Gracias al interés del entonces alcalde de la ciudad Camillo Casarini y al entusiasmo de su ferviente aliada, la editora Giovannina Lucca; Angelo Mariani, apasionado wagneriano, dirigió el estreno de Lohengrin y Tannhäuser, sumando así un nuevo hito en la gran historia musical de una ciudad, que desde el 2006 ostenta el título otorgado por la UNESCO de “La Ciudad de la Música”.
También fue en Bolonia donde se estrenaron por primera vez en Italia El holandés errante, Parsifal y Tristan und Isolde, tal y como recogen antiguos documentos de la célebre Accademia Filarmonica di Bologna, tomados de periódicos y revistas de teatro de la época. Tras el gran éxito de la primera representación italiana de Lohengrin (Bolonia, 1 de noviembre de 1871) y su posterior nombramiento como ciudadano honorario boloñés; en la famosa carta escrita en Bayreuth (3 de octubre de 1873), Wagner expresaba su deseo de visitar la ciudad de Bolonia lo antes posible. El 4 de diciembre de 1876, Wagner y Cosima asistieron a una representación de Rienzi, en el Teatro Comunale. Esa fue la única ocasión en que Wagner visitó Bolonia; pero el vínculo del compositor alemán con la ciudad, que había presentado sus óperas en Italia por primera vez, quedó reflejado en la carta dirigida, un año después a Giovannina Lucca: “Es allí, solo en Bolonia, donde tuve la oportunidad de poner mi pie en Italia. En Bolonia he encontrado algunos amigos verdaderos, algunas personas eminentes, y todo un conjunto de cosas que podrían haberme convencido de que me instalara entre tan excelentes y sinceros amigos, tan afines a mi idea principal en el arte”.
Estrenada en Italia por primera vez en el Teatro Comunale de Bolonia en 1888, Tristan und Isolde de Richard Wagner regresó al escenario de la Sala Bibiena el pasado 24 de enero para inaugurar la temporada de ópera 2020 del primer teatro de Italia que dio la bienvenida a Wagner; más de cinco horas de ópera, transmitida en vivo por Rai Radio 3, y una noche de auténtica gala con los vestíbulos repletos de canapés, pasteles, lentejuelas y champán, para brindar y felicitar al empresario y filántropo boloñés Marino Golinelli, gran mecenas del Teatro Comunale, en el año del centenario de su nacimiento.
Ralf Pleger firma una vanguardista y atemporal puesta en escena; una coproducción del Teatro Comunale con el Théâtre Royal de la Monnaie de Bruselas, de gran impacto visual, con citas conceptuales, paredes móviles y juegos de luces y sombras, en la que el lento descenso de un laberinto de iluminadas estalactitas inaugura el primer acto, y una enorme escultura humana giratoria cobra vida, dominando el centro del escenario durante el dueto de amor. Excelente concertación con el escenario en la la dirección de Juraj Valcuha, en su debut en Tristan und Isolde al frente de la Orquesta del Teatro Comunale. El director eslovaco fue el gran triunfador de la noche; aclamado con grandes ovaciones después de cada acto y al final del espectáculo.
Aplausos también para un elenco vocal formado por expertos wagnerianos, en el que destacaron Stefan Vinke como un Tristán que brilló especialmente en el tercer acto; Ann Petersen como veterana Isolde; Martin Gantner en el rol del fiel escudero Kurwenal, la mezzosoprano rusa Ekaterina Gubanova como una segura Brangäne y el conocido bajo alemán Albert Dohmen como rey Marke.
Como anunció el Sovrintendente Fulvio Macciardi durante la conferencia de prensa previa a la presentación de Tristan und Isolde, el objetivo de esta nueva etapa que se inicia con la Prima del Teatro Comunale de Bolonia, es mejorar la relación histórica de Wagner con el teatro, a partir de las obras del gran compositor alemán que se presentaron por primera vez en Italia en Bolonia. Lohengrin (2021), Parsifal (2022), Der fliegende Holländer (2023) y Tannhäuser (2024) serán las próximas citas de Wagner en la ciudad de Bolonia, reconocida por la UNESCO como Ciudad de la Música, gracias a su rica tradición musical y la riqueza de las propuestas del presente, que quiere recuperar su historia, y su glorioso pasado wagneriano, mirando hacia el futuro.
La rica tradición musical de Bolonia no se entendería sin dos instituciones de obligada visita: el Museo internazionale e biblioteca della musica y L’Accademia Filarmonica, uno de los centros musicales de Italia más fascinantes, cuya historia se entrelaza con los nombres de Mozart, Farinelli, Rossini, Verdi, Wagner, Puccini, Liszt, Brahms…
por Lorena Jiménez
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Foto: Ralf Pleger firma una vanguardista y atemporal puesta en escena de Tristan und Isolde.
Crédito: © Rocco Casaluci