El cuarto registro discográfico parido por el sello de la Fundación March tiene como protagonista a uno de los grandes pianistas que ha dado este país. Se edita el recital que Josep Colom ofreció en su auditorio madrileño en octubre de 2018. Hoy, a sus 75 años, el barcelonés está inmerso en un personalísimo estado de madurez creativa (hace sobre el piano lo que le da la real gana). Solo hay que echarle un vistazo al exquisito programa que proponía, tejido con ese finísimo hilo que solo los más sabios son capaces de enhebrar, y donde el nexo de unión fueron los Momentos Musicales de Schubert y las Pequeñas Piezas para Piano Op. 19 de Schoenberg (6 toros 6).

Un recital heterodoxo y ecléctico, donde campeó a sus anchas la exploración y la libertad, desbordante en inventiva y espontaneidad, pues el maestro atiborra de subjetividad las 20 piezas sabiamente elegidas de Bach, Mozart, Beethoven o Brahms, entre otros, consiguiendo hermanarlas hasta fundirlas en una misma partitura. Ricos ornamentos, bellísimo cantabile, improvisaciones marca de la casa, fulgor rítmico y vivos colores, que obran el milagro de resucitar la extinguida forma de enfrentarse en vivo a ese piano que legisló una época donde la música fluía sin los grilletes de la partitura. Colom usa los hipnóticos tempi a su antojo, como un verdadero prestidigitador, pues conoce como nadie sus laberintos y misterios.

Javier Extremera