Obras de RAVEL, BARTOK, MOZART, BEETHOVEN, SCHUMANN, BRAHMS, LISZT, CHOPIN, PROKOFIEV etc.
Martha Argerich, piano. Ruggiero Ricci, violín. Southwest Radio Symphony Orchestra Baden-Baden, Cologne Radio Symphony Orchestra / Ernest Bour, Peter Maag.
Profil Hänssler PH18050 (4 CD)
EXCELENTE JUVENTUD
El valor de esta caja se encuentra en servir como excelente ilustración en el conocimiento de la evolución de esta leyenda del piano, por contener grabaciones realizadas entre los años 1955 y 1961, antes de que 1965 la pianista argentina ganara el primer premio en el Concurso Chopin. La selección comprende trabajos en los que posteriormente profundizaría, como ocurre con la música de Ravel, parcela en la que ya acredita ser una pianista apasionante. El Concierto en sol mayor, con la Orquesta Sinfónica de Radio del Suroeste, que no suena excesivamente raveliana, muestra una técnica y musicalidad brillantemente imaginativa, y su Gaspard de la Nuit incorpora una Ondine acuosa que corre con claridad y limpidez con un sonido mágico en su tono evocador, junto con un Scarbo de gran impulso, o unos Jeux d’eaux de gran transparencia.
Argerich y Mozart pueden parecer, a priori, no conjugar muy bien; en su repertorio encontramos solo un puñado de Conciertos, con algunos grandes aciertos como la experiencia con Abbado del Concierto KV 466 en el Festival de Lucerna, pero el mundo de la Sonatas, salvo las dedicadas a cuatro manos o dos pianos, creo no tienen grabación en estudio. Por esto resulta de interés las incluidas en el tercero de los CD, las KV 310, 333 y 576, en unas lecturas espontaneas de tempi rápidos modeladas en base a una excelente claridad estructural, de fraseo limpio, ligeras y sin empleo de rubatos, recordando en ciertos aspectos a las de su maestro Gulda, aunque de mayor sentido poético en los movimientos lentos (maravilloso Andante cantabile de la KV 333). El Concierto n. 21 de Mozart, con la Orquesta de Radio de Colonia y Peter Maag, suena también hermoso, funcionado bastante bien el criterio de extremar la velocidad en unos movimientos externos llenos de vitalidad y ofrecer una fraseo exquisito pero sin carga sentimental en un Andante perfectamente dibujado.
El mundo de las Sonatas para piano de Beethoven tampoco figura entre los preferidos por la argentina, de ahí la importancia de esta Sonata Op. 10/3, grabada con 19 años, con un Presto bien teatralizado a base dinámicas desarrolladas desde el susurro hasta desgarradores fortes, abriendo camino al Largo mesto en el que se extrae bellamente toda la expresividad de la línea melódica. De su capacidad de fusionar bravura técnica y sensibilidad, queda testimonio el Chopin en una Barcarolle flexible, de rubatos naturales y gran belleza musical en los tonos difusos, así como un brillante Scherzo n. 3, de grandes contrastes entre los bloque temáticos. Aunque con alguna sección precipitada, la narrativa en general de la Balada n. 4 es fantástica: épica y lírica con buena progresión de la temperatura expresiva típica del último Chopin y excelente tratamiento de las voces internas, mientras que el mediocre sonido del Estudio n. 1 del Op. 10 impide cualquier valoración. La Sonata n. 3 de Prokofiev y las piezas más puramente virtuosísticas de Liszt y Schumann están dichas con pasión, defraudando las Rapsodias Op. 79 de Brahms, a las que le falta profundidad y algo de sosiego. Una visión bastante completa de una juvenil Argerich en una amplia gama de repertorios, recomendable por su valor testimonial.
José Luis Arévalo