He aquí un proyecto necesario. Por muchas razones. En primer lugar, claro, por la calidad interpretativa de la Capella Augustina y su director, Andreas Spering. Una fusión perfecta de rigor histórico y talento instrumental. También, por una inquietud sobre la comunicación musical que lleva a la formación a trabajar repertorio antiguo y clásico pero también a colaborar con autores contemporáneos. En este caso, y aquí encontramos otra razón, el elegido es José María Sánchez-Verdú, sin lugar a dudas uno de los mejores compositores, marcado por la autoexigencia y la visión trascendental en todos los campos comunicativos: intelectual, tímbrico, armónico, dramático...

En el presente CD, encontramos dos realidades que se unen. En principio, la de las Siete últimas palabras de Cristo en la cruz, ese monumento de la música religiosa que es pura emoción y que se halla vinculada por nacimiento a la catedral de Cádiz. Sánchez-Verdú ha compuesto para la ocasión Sheba, siete piezas breves que glosan cada una se las sonatas que forman la obra de Haydn. Resulta maravilloso comprobar cómo el maestro del siglo XVIII es homenajeado por el maestro actual sin renunciar a la personalidad en ningún momento, y como la formación aborda esta doble realidad simultánea con absoluto éxito. Un acierto también que en el disco no aparezcan ambos compositores separados, sino que el lenguaje de uno y otro aparezca mezclado. Gracias a esto, la dimensión conceptual también queda defendida.

Juan Gómez Espinosa