Jesús Guridi completa el panorama de las figuras que participaron en el renacer de la música de cámara española. Conocido por su tendencia a utilizar la música popular como material para sus obras academicistas, en estos dos cuartetos culmina esa técnica con absoluta maestría. El Cuarteto n. 1 fue compuesto en 1933, poco antes de la guerra civil. El Allegro muestra el material temático y los otros tres lo desarrollan y varían en alternancia de tiempos. El Cuarteto n. 2 es una obra cumbre tanto en la literatura del compositor como en la música de cámara española. Compuesto en 1949, recibió el Primer Premio del Concurso Nacional de Música que convocaba el Ministerio de Educación. Ya se observan guiños a una mayor búsqueda de libertad, tendencia muy evidente en el cuarto movimiento. También las armonías se vuelven más libres para ayudar a la expresividad. El Adagio sostenuto es una buena muestra de ello: valiéndose del material temático del primero, lo presenta en una especie de plegaria que más que doblegarse se tensa por la lentitud obligada del tempo. El Cuarteto Bretón ha sido el encargado de la grabación y recuperación de esta música. Un éxito por partida doble que no sólo muestra la profesionalidad de su trabajo, sino su intención de devolver el prestigio a la música de cámara española.

E.M.