Javier Perianes, piano.
HMC 952099. (CD+DVD)
Harmonia Mundi Ibérica
UN FALLA DE ALTO VOLTAJE
Se debería de poner un adhesivo advirtiendo de peligro por ”alto voltaje” en el último disco de Perianes, que sacude como un trapo lleno de polvo los resortes sonoros de la obra pianística de Falla. Una interpretación repleta de nervio y tensión, febril y cartilaginosa, rebosante de claroscuros y expresividad, con una milagrosa mezcla de robustez y finura. Un Falla puro sin algodones, de convulsiones eléctricas y aires suicidas que parece forjado en metal. A partir de ahora en el piano del gaditano no todo será luz, delicadeza y color. Lo sombrío y amargo, las dentelladas, la virilidad y la potencia sonora desbordada también se erigirán en pilares estilísticos gracias a estos registros condenados a perdurar en el tiempo.
Falla entra de un portazo con las Piezas Españolas, versión hechizante y racial pero sin derramar nunca el tintero del folclore. La Montañesa (una de las cimas) es de una exquisita brillantez formal, vidriosa y evocadora, transfigurándose en un imaginario Preludio núm. 13 de cualquiera de los Libros de Debussy. En la albeniciana Andaluza y su ajetreado tablao, los voltios se disparan en una continua lucha virtuosística. Lo inalcanzable (dudo que haya una mejor en disco) es el monumento rítmico de la Fantasía Bética, endiablada pieza gimnástica que Perianes parece cincelar a martillo sobre roca como si la vida le fuera en el empeño. Una obra que nos la redescubre a latigazos jugándosela en cada compás y poniendo el instrumento al borde de un precipicio. Todo un espectáculo bélico-sonoro (arrolladores glissandi) donde los ecos disonantes y desgarrados del cantaor nos dejan sin aliento. Lava sonora que devora todo a su paso. La satieiana Canción -de una honda simplicidad- le sabe al de Nerva BRAS PARA PIANOa nana, exhalando lirismo pero conteniéndola en gratuitos desbordamientos emocionales. El Homenaje resucita el fantasma de Debussy agarrado a una guitarra con teclas. Prodigioso cubismo musical.
Sigue el disco resistiéndose a legarnos unas Noches de esas de palpar el cielo (Gonzalo Soriano lo rozó). Ésta de Pons y la Sinfónica de la BBC (grabada en directo en la Barbican) no dictará jurisprudencia, pese a su elevada altura. Una visión rugiente y crispada donde todo se nos muestra sin velar ni sugerir. El “misterioso” que exige la partitura nunca se vislumbra, careciendo de seda, embrujo y suspense la marcial dirección, pese a que el ardoroso piano pincela de maravilla las resonancias acuosas de nuestra tierra. Yvan Nommick se adueña del reportaje en el DVD extra grabado en la Antequeruela, regalándonos una inolvidable lección musical con Perianes sentado al teclado de Don Manuel. Hoy solo existe un Falla mejor que éste, y es el que derrocha en directo este rapsoda metido a pianista. Multipliquen todo lo dicho por dos.
J.E.