Como se indica en las completas e interesantes notas, la escucha de la integral pianística de Falla permite un recorrido completo de la evolución del maestro gaditano, desde las formas musicales propias de fin de siglo XIX, al esencialismo de los Homenajes, pasando por el nacionalismo impresionista. Juan Carlos Rodríguez se lanza con total sinceridad y honestidad a desentrañar estos mundos tan distintos, dando un tratamiento propio de la música de salón a las piezas ligadas el espíritu romántico, acercándose con elegancia a la bella Serenata, brillantez al Alegro de Concierto y exquisitez sonora a esa pieza tan especial que es Canción. El nacionalismo musical que representan las Cuatro Piezas Españolas es abordado  con preciosismo y minuciosidad en Cubana y Montañesa, para explotar de modo exuberante en la Andaluza, anticipando lo que nos ofrecerá en la Fantasía Baetica. Aquí juega con el tempo, la dinámica, el ritmo y el color de manera fluida y atractiva, transmitiendo en todos los pasajes, ya sean los que imitan el sonido de la guitarra, el taconeo o los puramente melódicos, un especial compromiso que le permite construir una versión transparente de excelente fraseo, en la que se respiran los fuertes y pronunciados acentos y la conciencia del pulso continuo propio de las fluctuaciones expresivas del cante jondo. Excelente sonido y disco que merece repetidas escuchas.

José Luis Arévalo