Tuvimos la fortuna de escuchar el piano del turco Fazil Say (1970) hace un par de años, en el Auditorio Nacional de Madrid. Velada hermosísima, donde comprobamos su saber hacer como pianista, pero también como compositor (por cierto, bastante más que interesante). Say pertenece a la Turquía comprometida con las libertades (incluso poniendo en riesgo su persona…), las artes y, sobre todo, con la música. En aquella ocasión disfrutamos de su lectura de Mozart y, especialmente, de su Debussy. En ambos casos intachable. Pero esta selección de Nocturnos (faltarían unos pocos para ser integral) nos da una perspectiva incluso de mayor calidad que la de aquella velada. Su Chopin no tiene desperdicio. Por supuesto, brillante en su ejecución técnica. Pero, sobre todo, dotado de una melancolía, en cierta manera, contemporánea. Nada que ver con el sentido casi teatral con el que en otras épocas se leía al polaco. Say se muestra doliente e introspectivo de una manera sobria, madura, contenida. Impresiona. Chopin era un exiliado melancólico y parece que Say también lo es, en cierta medida. Se nota. En fin. Le deseamos lo mejor en lo musical y en lo personal. Excelente fichaje de Warner Classics. Seguro que aportará muchos más éxitos al mundo de la interpretación al piano. 

Juan Berberana