Harmonia Artificioso Ariosa es una colección de siete partitas publicadas por el compositor austro-bohemio en 1696 durante su magisterio de capilla en la catedral de Salzburgo. La recepción de la Harmonia ha sido relativamente reciente eclipsada quizá por las famosas Sonatas del Rosario. Con una formación de trío-sonata, cada una de las partitas de la Harmonia evoca un diferente estado del alma a través del imaginativo uso de la retórica habitual en Biber. Un microcosmos de contrastes de tempo, dinámicas, texturas, ritmos y diferentes tonalidades se enmarca en el macrocosmos de cada partita, en el que las danzas que la forman se agrupan por el afecto que sugieren.

Hay una scordatura (cambio de afinación en las cuerdas) distinta en cada partita y la escritura es técnicamente muy exigente, pero esto no es un obstáculo para las extraordinarias Meret Lüthi, Sabine Stoffer y Anja Graewel. Con sus instrumentos Steiner (los mismos que utilizaba Biber) despliegan un virtuosismo fulgurante, casi diabólico. Le acompaña un nutrido grupo de continuo de Les Passions de l’Ame, el laureado conjunto barroco bernés que dirige Lüthi. Clave, órgano, violone, laúd, tiorba, reforzados en ocasiones por instrumentos como el dulcimer y el tar persa y con una percusión muy bien utilizada, producen una sonoridad diferente, rica y especiada como un goulash.

Una producción extraordinaria, apta para los paladares más exigentes.

Mercedes García Molina