Para Andrea Bacchetti (ver “Hemos escuchado” en este mismo número) Bach forma parte de su vida, le es tan natural como le era escribir para Gabriel García Márquez, que también adoraba a Bach con la misma intensidad. Este nuevo disco del italiano, curiosamente es de lo que trata, del Bach “italiano”, que entendemos además de las obras explícitas (Concerto italiano), dos Corales de una belleza melódica y cantabilidad enorme (BWV 659, 645), los Conciertos sobre Vivaldi BWV 972 (sobre el Op. 3/9 del italiano) y BWV 974 sobre el Concierto para oboe de A. Marcello, el Capriccio sulla lontananza del suo fratello diletissimo BWV 992 y el Aria Variata alla maniera italiana BWV 989. El espléndido empuje rítmico, la delicada gracia expresiva y el extraordinario refinamiento de la interpretación, convierten este disco en una pizza bachiana-italiana de la más alta cocina pianística posible. Maravilloso fraseo en el Capriccio (Adagiosissimo, Fuga), magnética atmósfera la creada en el Aria Variata o la emocionante serenidad que desprenden los dos Corales y los lentos de los Conciertos sobre Vivaldi y Marcello, además de una de las mejores interpretaciones modernas del Concerto Italiano. Y como en otros discos de “Bach-etti”, el mítico piano Fazioli vuelve a ser “su” instrumento.

Gonzalo Pérez Chamorro