Música clásica desde 1929

Discos recomendados de Ritmo

En esta sección encontrará los 10 discos que la revista RITMO recomienda cada mes, clasificados por meses y por su orden de recomendación del 1 al 10. Se archivan los recomendados desde junio 2011, para ver anteriores ir a "Ritmo Histórico".
Haciendo "clic" en el título de cada disco o sobre la foto, accederá a su ficha y a la crítica publicada en Ritmo y, cuando es posible, a las diferentes tiendas donde podrá adquirir el disco físico, o a las plataformas digitales desde donde podrá escucharlo en "streaming" o descargarlo online.

Ritmo MARZO 2013 - Núm. 861

BACH: Concierto italiano. Capriccio BWV 992. S. francesa 5. Fant. cromática y fuga.

 

András Schiff, piano.
EuroArts, 2066768 (DVD)

 



La crítica

Dirigido por el magnífico y veterano realizador Bruno Monsaingeon en 1989 (en el libreto figura erróneamente 1992), que comienza ofreciéndonos un primer plano de András Schiff abriendo un volumen de la primera edición de las obras para teclado de Bach, auspiciada por la Bach-Gesellschaft, este recital, grabado sin público en estudio, es coetáneo, por tanto, del grueso de las grabaciones bachianas realizadas por el pianista húngaro en los años ochenta para el sello Decca. Schiff pertenece, por derecho propio, a la elite de los músicos que, en el siglo XX, han tocado Bach al piano. Él lo hace casi sin apenas pisar el pedal, como le enseñó su admirado George Malcolm (y como dicta el sentido común), pero para ello hace falta tener una técnica y una pulsación como las suyas, certeras y diáfanas. Schiff toca Bach como si la música hubiera sido compuesta por él mismo: entiende cada resquicio de la música, lo explica, lo adorna si es necesario, lo frasea con un mimo en el que cada nota parece imprescindible para articular el discurso global. Da igual que haya que emular danzas francesas, remedar un concierto italiano, llorar la partida de un hermano o sumergirse en los recovecos de una Fantasía cromática y una no menos cromática y descomunal fuga: Schiff hace todo suyo con naturalidad y la música sale de sus dedos con la misma inevitabilidad con que mana el agua de un arroyo. En sus manos, lo difícil parece fácil y pone Bach al alcance de todos. Una vez más, extraordinario.

L.G.

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