Con el ciclo "Los Couperin al clave", la Fundación Juan March inauguró una serie de tres conciertos dedicados a la música francesa para clave. En este caso, el foco de atención recae sobre la familia Couperin, familia de grandes clavecinistas que se extendieron durante dos siglos, desde 1626 con el nacimiento de Louis Couperin a 1826 con la muerte de Gervais-François Couperin, y cuyo legado podremos apreciar en estos tres conciertos.
El barroco francés, con su sonoro y grandioso concepto del clave, es uno de los grandes pilares del repertorio para cualquier clavecinista. Junto a Rameau, la amplia producción de la familia Couperin, encabezada por François, suponen los ejes fundamentales de este repertorio en la valiosísima aportación de la música francesa al clavecín.
Yago Mahúgo es especialista en música francesa para clave del periodo barroco, algo que podemos apreciar por los registros sonoros que ha dedicado a esta música. Influenciado por Christophe Rousset, demuestra una vez más la solidez de concepto que tiene sobre el clave francés que se transforma en una fluidez interpretativa a través de un refinado dominio de la agógica que pudimos admirar tanto en el Prelude non mesuré de Louis Couperin así como en Les bergeries y Les baricades mistérieuses, contenidas en el Sexto orden de piezas. Ambas obras son de gran belleza y profunda sensibilidad y quedan especialmente dulces y expresivas en el clave del constructor Keith Hill que Mahúgo utiliza desde hace muchos años.
Aún con la tierna y entrañable ingenuidad galante de las cuatro naciones de Armand-Louis Couperin y la Sonata de Gervais-François Couperin, todo el programa tiene mucho interés, sobre todo por el recorrido histórico que hace desde la primera etapa del barroco hasta bien entrado el clasicismo. Pese a algunos deslices de notas caprichosas que no encontraron su lugar en estas endiabladas últimas obras, el concierto estuvo lleno de contrastes y matices gracias a la elección de las piezas, entre las que destacaban las de François "El Grande".
Es de agradecer que la Fundación Juan March dedique, cada vez más, conciertos a la música antigua dando a conocer en sus ciclos música que, aunque de gran belleza, no es habitual en las salas de conciertos.
Alberto Rodríguez Molina
Ciclo "Los Couperin al clave", Fundación Juan March.
Yago Mahúgo, clave.