Para el 8ª concierto de abono de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria volvió Günther Herbig, director honorario del conjunto grancanario, en el único concierto juntos que ofrecerán esta temporada. Como la platea del Auditorio volvió a recuperar las primeras filas, que se habían eliminado para ampliar el espacio dedicado a la orquesta, volvimos a escuchar una plantilla reducida.
El veterano maestro nos brindó un programa clásico que abrió la Sinfonía 29 de Mozart, en una lectura muy pulida, basada en un sonido empastado y homogéneo, donde primó el equilibrio entre todas las secciones, de perfiles redondeados y sin aristas, pero precisamente por ello de una sola pieza, sin casi contrastes, de tal forma que el par de frases que Herbig destacó para que sonaran en pianísimo parecieron fuera de lugar en el contexto del que hablamos. Las parejas de oboes y trompas, que siempre aportan una nota de color y contraste con las cuerdas, fueron relegadas a un segundo plano, diluidas entre el conjunto de cuerdas. Lectura gris, incluso en el enérgico minueto, agarrotado y sin gracia. Premisas que se mantuvieron en la Sinfonía Nº 4 de Schumann.
Interpretada con la misma exigua plantilla que Mozart, el indudable bagaje profesional de Herbig supo diferenciar las sonoridades de ambos autores, pero también aquí faltó vigor y energía. Los sucesivos crescendos, como el extraordinario que da inicio al último movimiento, estuvieron mal graduados, perdiendo su sentido como acumulación de tensiones que culminan en un gran climax. Se salvó la romanza del segundo movimiento en su ensimismado recogimiento de música de cámara con la impecable participación del concertino y los solistas de oboe y cello.
La Filarmónica de Gran Canaria actuó con intachable profesionalidad, limitándose a ofrecer lo que la batuta le solicitaba. Günther Herbig nos ha dejado excelentes veladas en el recuerdo pero no ha sido así en esta ocasión y es que, desgraciadamente, los años no pasan en balde para nadie.
Juan Francisco Román Rodríguez
Orquesta Filarmónica de Gran Canaria / Günther Herbig.
Obras de Mozart y Schumann.
Auditorio Alfredo Kraus. Las Palmas de Gran Canaria.