La Orquesta Filarmónica de Gran Canaria abrió su temporada de abono 2023-24 con el monumental Requiem de Verdi, en conmemoración del 150 aniversario de su estreno. La magna obra verdiana obtuvo una lectura magistral por parte del titular de la agrupación, Karel Mark Chichon, que ya la había ofrecido hace unas temporadas dentro del Festival de Música de Canarias.
El maestro Chichon ha hecho suya la pieza, ofreciendo una lectura ejemplar por la coherencia y variedad de su discurso, donde cada una las diferentes secuencias obtienen su relieve, integrándose a su vez en el conjunto sin desequilibrios. Fue la suya una interpretación de tempi vivos pero no apresurados, sin tiempos muertos, que aprovechó los numerosos remansos de líricos, como los bellísimos los dúos de las dos voces femeninas, para aliviar la tensión de los grandes tutti en fortísimo.
Impecable el cuarteto de voces solistas encabezado por Krassimira Stoyanova que ha hecho de esta pieza uno de sus caballos de batalla, infalible en la proyección de una voz en plena madurez, desahogada tanto en un registro agudo vibrante que la interprete regulaba a voluntad, prodigando hermosos filados, como en un grave tan peligroso como demandado en esta pieza.
Olesya Petrova asombró por la monumentalidad de sus medios de auténtica mezzo dramática, de un volumen capaz de superar cómodamente los mayores tutti, sin descuidad por ello la línea de canto, ni los reguladores de intensidad.
El tenor Dmytro Popov, apechugó con la parte solista menos lucida, frecuentemente en tesituras incómodas, que superó holgadamente gracias a una voz pulposa sólidamente manejada, con momentos remarcables como el inicio del Hostias en un etéreo pianisimo, Macanovskis, auténtico bajo en plenitud, dotó a su parte de la majestuosidad y rotundidad que le son propias, con pasajes aterradores como el Confutatis.
Los 60 integrantes del Coro Estatal Kaunas ofrecieron una lección del mejor canto coral, capaces del canto más atronador como de los más etéreos susurros, con un sonido muy definido en las distintas cuerdas que no impedía el empaste global. La Filarmónica de Gran Canaria empezó la temporada en gran forma, afrontando con flexibilidad tanto los más delicados pasajes camerísticos como los espectaculares tutti en fortísimo, con unas texturas suficientemente aireadas para orillar el amazacotamiento. En definitiva un Requiem de Verdi para el recuerdo.
Juan Francisco Román Rodríguez
Krassimira Stoyanova, Olesya Petrova, Dmytro Popov, Rihards Macanovskis.
Coro Estatal de Kaunas. Orquesta Filarmónica de Gran Canaria / Karel Mark Chichon.
Requiem de Verdi
Auditorio Alfredo Kraus. Las Palmas de Gran Canaria.