Se ha declarado por ilustrados lemas psicoacústicos que hasta tres voces, tres líneas instrumentales son percibibles plena y simultáneamente de forma independiente en una escritura lineal contrapuntística. De ahí (relativamente) modernas colecciones de fugas con dicho número de voces.
Al margen de cuerdas múltiples, todo un hábil ejercicio de contrapunto con las limitaciones que supone no disponer de la voz redundante o (levemente) disonante sobre la triada armónica. En suma, todas las exigencias de la música solista unidas a las concertantes de la cámara tradicional.
Wolfgang Amadeus Mozart: ofrece en su Divertimento en mi bemol mayor un amplio rosario de texturas musicales propias, sostenidas por los dos sólidos Allegros en sus extremos. El primero más enjundioso quizás, pero el segundo de ellos de gran vivacidad, frescura y riesgo, que remató con brillantez esta amplia obra.
Riqueza de articulación, permanente sentido del fraseo y un delicado engranaje sonoro en la justa imitación de las partes.
Y de la tonalidad de mi bemol mayor con sus equilibrados tres bemoles en la clave, de implícitas resonancias masónicas, a su relativo menor (do menor), tono emblemático del romanticismo más genuino.
Del Trío de cuerda en do menor, op. 9 núm de Ludwig van Beethoven, destacamos el lirismo del Adagio con espressione junto a la sorprendente modernidad rítmica y sonora del Scherzo. Especialmente en su característico Allegro molto e vivace con delicado Trío, un un movimiento que adelantaba con firmeza y sentido, un romanticismo mucho más lejos de un afectado Sturm und Drang clasicista y llamando con fuerza a las puertas (si no yendo más allá) de un Schumann en ciernes.
Energía que se transmitió con lógicas formales mucho más ambiciosas, al Finale, Presto. Texturas poderosas para un elenco como el trío de cuerda que incluían breves detalles, ya más propios de una incipiente orquestación.
Música de cámara en estado puro, complejidad y compromiso, con final suspendido en el aire, digno de un maestro innovador.
Luis Mazorra Incera
Trío Tritón: Jone de la Fuente, violín; Martí Varela, viola; y Javier Martínez, violonchelo.
Obras de Beethoven y Mozart.
OCNE-Satélites. Auditorio Nacional de Música. Madrid.