Se dice que Miguel Ángel Buonarroti, para eliminar de los bloques de mármol con los que iba a esculpir una estatua, las partes que le estorbaban para plasmar sus concepciones, les daba golpes de escoplo de 2 centímetros de profundidad. Después de esta pelea con la materia obtuvo algunas de las esculturas más sublimes e impresionantes del arte universal. A pesar de la violencia con que las creaba, sus esculturas, son ejemplos de fuerza pero también de un exquisito refinamiento y algo similar ocurre con el barítono Florian Boesch; un habitual en nuestros ciclos lideristicos en Madrid y que en la presente temporada ya nos ofreció un recital el pasado mes de septiembre, ahora nos ha ofrecido este y habrá un tercero en Junio con el infrecuente ciclo de canciones de Ernst Krenek Reisebuch aus den österreichischen Alpen [Diario de viaje por los Alpes Austriacos].
Boesch no es un cantante para los excesivamente puristas, para aquellos más atentos a la literalidad de la nota que a su contenido. El barítono posee una voz poderosa, aunque no equilibrada en todos los registros y en las composiciones más líricas quizá no llegue la quintaesencia del refinamiento, pero, con su armamento vocal recio, varonil y su inteligencia para moldear cada frase de los textos que interpreta, logra resultados, para mi arrolladores.
El Winterreise de Boesch no es el viaje de un frágil poeta hacia a la muerte, sino el de un león herido que ruge ante su trágico destino. Es el viaje de un ser desesperado que se revuelve con furia frente a su irremediable final. Y considero que su aproximación a la obra es tan digna como cualquier otra, con una cierta ventaja, es muy infrecuente. Poseedor de una dicción extraordinaria, el barítono, la aprovecha para conceder a los textos un significado, dramáticamente hablando, de enorme expresividad.
Un gran interprete. El barítono estuvo atentamente apoyado por Justus Zeyen al piano.
Francisco Villalba
Florian Boesch, barítono. Justus Zeyen, piano
XXVII Ciclo de Lied del CNDM en el Teatro de la Zarzuela
Franz Schubert, “Winterreise”
Foto: Florian Boesch & Justus Zeyen / © CNDM - Rafa Martín