El 68 Festival Internacional de Música y Danza se inauguró con un concierto sinfónico en el que Ivor Bolton dirigió a la Orquesta Ciudad de Granada junto a la violinista Viktoria Mullova. En una velada consagrada al primer romanticismo, el director británico demostró cuán dúctil es la orquesta granadina, que pese a la crisis económica que le afecta está viviendo un buen momento artístico.
Sin duda, uno de los grandes aciertos del actual director del Festival, Pablo Heras-Casado, ha sido apostar por un programa sinfónico en el que los grandes nombres de la dirección y la interpretación estén presentes. Tal fue el caso de Ivor Bolton, que deslumbró en su primera visita a Granada. Conocido ya en nuestro país por sus éxitos en el Teatro Real, fue todo un acierto invitarlo a inaugurar el Festival de Granada en la presente edición, dirigiendo a la orquesta local, una formación versátil y de gran potencial que se crece ante una buena batuta. Bolton, heredero de la gran tradición británica de dirección, es de gesto intuitivo, y su sutil concepción de los matices y las transiciones son grandes aciertos de su estilo, elementos todos ellos con los que supo extraer la mejor interpretación a la OCG.
La primera obra del programa, la obertura Jeanne d’Arc de Ignaz Moscheles, fue un alarde de sutilezas expresivas, desde la serenidad inicial de la pieza hasta el dramatismo final, pasando por los pasajes heroicos centrales. El director dibujó a la perfección el trabajo motívico de cada parte orquestal, contribuyendo a subrayar los momentos expresivos de la partitura, compensando los efectivos orquestales para construir una versión bien concebida y de gran sutileza interpretativa.
Uno de los platos fuertes de la noche fue el Concierto para violín y orquesta en re mayor op. 61 de Ludwig van Beethoven. La violinista Viktoria Mullova fue la encargada de interpretar la parte solista, en una versión llena de fuerza y agilidad. La violinista rusa, que ya visitara el Festival en 2003 para dejarnos en la memoria una magistral versión del Concierto para violín de Sibelius, volvió a deslumbrar con su virtuosismo y su meridiana concepción del repertorio. Desde la primera nota, el violín de Viktoria Mullova se hizo presente y patente en la noche granadina, con una sonoridad limpia y un discurso perfectamente definido; el dominio técnico de la violinista es solo comparable con su percepción estética del repertorio, perfilando magistralmente en el caso del concierto beethoveniano cada línea melódica, cada motivo rítmico, cada pasaje a dobles cuerdas. De este modo, pudimos asistir a una interpretación magnífica del que es considerado una de las obras cumbres del repertorio para violín solista. La OCG, con Ivor Bolton a la cabeza, compensó en todo momento sus fuerzas para dar paso al discurso solista, siendo el complemento oportuno en prácticamente cada momento.
La segunda parte del concierto se dedicó por entero a la Sinfonía núm. 3 en la menor op. 36 “Escocesa” de Felix Mendelssohn. Esta obra, llena de motivos melódicos que evocan el viaje por las Highlands del compositor centroeuropeo, requiere un trabajo de la melodía y de los efectivos tímbricos de la orquesta muy meditado, labor que realizó de forma preciosista el director Ivor Bolton. Podemos decir, sin lugar a dudas, que en esta obra escuchamos a la mejor OCG, en una dirección que extrajo todo el potencial de la formación. Cada entrada estaba perfectamente compensada, con unas cuerdas poderosas y una sección de vientos precisa y de un timbre bello y presente, destacando el trabajo solita las maderas y la rotundidad de las trompas. El numeroso público asistente, puesto en pie, ovacionó prolongadamente a director y a orquesta, obligando a Ivor Bolton a salir a saludar hasta en cuatro ocasiones, y dejando de este modo constancia del agrado y la calidad del concierto ofrecido en esta noche inaugural del Festival de Granada.
Gonzalo Roldán Herencia
68 FESTIVAL DE GRANADA
Programa: Ignaz Moscheles, Jeanne d’Arc op. 91; Ludwig van Beethoven, Concierto para violín y orquesta en Re mayor op. 61; Felix Mendelssohn, Sinfonía núm. 3 en la menor op. 56 “Escocesa”.
Orquesta ciudad de Granada
Solista: Viktoria Mullova (violín)
Director: Ivor Bolton
Lugar y fecha: Palacio de Carlos V, 21 de junio de 2019
Foto © Festival de Granada | Fermín Rodríguez