Música clásica desde 1929

 

Críticas seleccionadas de conciertos y otras actividades musicales

 

Crítica - Iván y los tres Serguéis

Madrid - 05/12/2019

Una versión cuidada del Segundo concierto para piano y orquesta de Rachmáninov, con un fraseo que se regodeaba desde un primer momento, en su gustosa fluidez, propia de la música que luego será heredada por el cine de la época dorada del Hollywood sonoro, fue la desplegada por la pianista Jiyeong Mun junto con la Orquesta de la Comunidad de Madrid dirigida por Víctor Pablo Pérez.

Una versión donde sus ingredientes musicales parecieron fundirse en un imaginado crisol plástico que se sustentó en la disposición, control y excelente adaptación al conjunto de esta virtuosa coreana. De esta obra tan frecuente, popular y exitosa, pueden plantearse, es verdad, otras visiones, permite formas diversas de ser atacada, quizás más electrizantes, vistosas o sorprendentes, con otros conceptos de virtuosismo en la articulación, de velocidades o de jerarquía dinámica entre líneas melódicas y “de acompañamiento” o atmosféricas, por decir algo.

La marcada musicalidad casi sinfónica, forma en que ésta fue planteada hoy, con tempi moderados y envolventes, y cierta adscripción a soluciones más melódicas, licuescentes o amoldables, que brillantes, está, sin duda, en el muestrario musical de la época y, sobre todo, de la que vino inmediatamente después. Pensemos, por ejemplo, en un longevo y ligeramente más joven, Leopold Stokowski, por ejemplo.

La propina que a renglón seguido ofreciera Jiyeong Mun, amplió aquella fluida musicalidad con una pieza a solo de carácter plácido, por momentos casi una etérea consolación lisztiana: El Preludio op.23 núm. 4 del propio Rachmáninov.

El Iván el terrible fílmico se planteó con eficacia narrativa en una mezcla de recitado y música de concierto, que asumía, de paso, cierta aspiración didáctica. Un recitado con abundante papel y, en ocasiones, declamando sobre la orquesta o el coro, en la profunda voz de Juan Echanove, notables solos de contralto por Pilar Vázquez, y, claro está, la poderosa música de Prokófiev.

- “…La noche está en calma... ¡No por mucho tiempo!

Un emotivo final de patente sabor patrio, himnos incluidos, dentro y fuera del escenario, rindió homenaje a aquel Iván, sí, cuando aquello ya enloquecido y… “terrible”, y, también, a dos Serguéis, a “los” dos ejemplares Serguéis del cine: Prokófiev, el músico, y Eisenstein, el cineasta...

Pero... ¡se me olvidaba con tanta campana, grabada o in situ, y estos metales a pleno pulmón…!  -que no hay dos sin tres...- nuestro ilustre protagonista inicial de hoy…: ¡Serguéi Rachmáninov!: Iván, pues, y… ¡tres Serguéis!

Luis Mazorra Incera

Jiyeong Mun, piano; Pilar Vázquez, contralto; y Juan Echanove, recitador. Orquesta, Coro y Pequeños Cantores de la Comunidad de Madrid / Víctor Pablo Pérez.
Obras de Prokófiev y Rachmáninov.
ORCAM. Auditorio Nacional de Música. Madrid.

885
Anterior Crítica - Tempi giusti, solicitud y transparencia
Siguiente Crítica - Fernández Rueda nos canta una Bella -bellísima- molinera