Acaba de nacer una de las ideas más estimulantes del proyecto general musical que alberga el Auditorio de la Diputación de Alicante (ADDA) liderado por su director artístico el maestro Josep Vicent. Es la creación de la orquesta ADDA-Simfònica Jove, entendida como ese semillero de músicos que está llamado a alimentar a ADDA-Simfònica, cimentando aún más la razón de ser de esta institución en la provincia alicantina.
Para su presentación ha invitado al director y violinista alicantino Francisco Maestre, músico de gran experiencia en este tipo de planes formativos al ser, desde 2009, director de la Orquesta Joven de la Provincia de Alicante.
La dinámica en su modo de transmitir a los instrumentistas hacía fáciles las indicaciones dentro de la complejidad contrapuntistica del Preludio de la ópera Los Maestros Cantores de Núremberg de Richard Wagner, que fue sucesivamente descubriendo conforme se adentraba en su desarrollo, con el que autor pretende hacer casi una presentación y resumen de su argumento dramático, a través de sus distintos temas, intención esencial para integrar la variedad motívica de esta pieza, elocuente, de ondulante efecto sonoro y lírica a la vez, que supone siempre un situarse más allá de las estrictas connotaciones musicales y sí tener que alcanzar ese sonido orquestal tan característico del supremo arte total del gran operista alemán.
Hacer que este ideal se materialice en una formación joven ya es un auténtico milagro tanto en su aspecto y proceso formativos como en la ilusionante capacidad de aprendizaje que ello comporta para los músicos.
Cambiando de estética y siguiendo en su intención pedagógica práctica, el director hizo todo un despliegue de color en las Danzas Polovtsianas pertenecientes al segundo acto de la ópera El Príncipe Ígor de Alexander Borodin. La orquesta parecía haberse liberado de los moldes wagnerianos entrado en una vorágine rítmica de gran intensidad y de muy preciso ajuste, con los que se demostraba el eficaz trabajo de ensayo en su preparación y montaje.
Cuidó con gran detalle el constante sentido exótico que las impregnan, acentuado la sensorialidad que surge de la sonoridad de su discurso potenciado por una exigente como expansiva técnica orquestal que roza el límite de las posibilidades físicas de los músicos. Se convertía su interpretación en uno de los momentos cruciales del concierto.
La parte más esperada del programa vino propiciada por la Octava Sinfonía en Sol, Op. 88 de Dvořák. Tratada desde el primer gesto del director como un crisol donde experimentar la posibilidades de la formación, se adentró en sus pentagramas entregándose a una serena complacencia que llegó a convertirse en cierta alegría en el primer movimiento, que contrastó con el carácter sereno y suave dado al Adagio consecuente, sirviendo para profundizar en el equilibrio de los planos sonoros de la orquesta.
Francisco Maestre alcanzó otro momento singular de su actuación en el tercer movimiento al que imprimió ese carácter schubertiano que tanto lo distingue del conjunto de la obra, destacando la intervención del oboe con su singular canto. Para terminar, quiso resaltar el aire rapsódico del Allegro ma non troppo final que fue sucesivamente tensionando hasta su apoteosis final, donde quedaba patente el gran dominio de la orquestación romántica del compositor bohemio. Como respuesta al entusiasmo del público repitió un movimiento de la sinfonía dejando que la orquesta mostrara un punto de espontaneidad en su ejecución.
Antes de despedirse del escenario, el director tuvo el detalle de agradecer a cada uno de los músicos colaboradores pertenecientes a ADDA-Simfònica que han participado en el montaje de este primer encuentro de ADDA-Simfònica Jove, especialmente a la concertino Anna Korpalska que, junto a varios compañeros, ha servido para integrar a los jóvenes en el instrumento, adiestrándoles en el ejercicio de lectura, atención, seguimiento, escucha y respuesta que requiere un músico de orquesta.
El resultado artístico ha sido contundente, lo que lleva a pensar en la necesidad de prestar toda la atención institucional posible para lograr y mantener la función que, sobradamente justificada, un proyecto de esta naturaleza está llamado a desarrollar.
José Antonio Cantón
ADDA-Simfònica Jove.
Director: Francisco Maestre.
Obras de Alexander Borodin, Antonin Dvořák y Richard Wagner.
Auditorio de la Diputación de Alicante. 06-VIII-2021.