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Críticas seleccionadas de conciertos y otras actividades musicales

 

Crítica / Herencia africana: Hannah Kendall, Missy Mazzoli y Florence Price - por Ramón García Balado

Santiago de Compostela      - 31/05/2024

Concierto dirigido por Sebastian Zinka, abordando temáticas ciertamente próximas, y que  dedicó su programa a tres compositoras dos de las cuales ya estuvieron en las actividades de las Xornadas de Música Contemporánea de 2022, en un programa anunciado como Cartografías do Plural, con moderación de la  musicóloga Rosa Fernández. LA JONDE Focus, dirigida por Fabián Panisello, había elegido obras de Hanna Kendall, Missy Mazzoli, Carlos G. Perales, Jesús Torres y Pierre Jodorowski.   Hanna Kendall, estuvo en esta ocasión con Tuxedo: Vasco da Gama, con raíces en Guyana y precedentes familiares en tercera generación por un abuelo músico de jazz, y estudios en la Exeter University, en canto y composición, siguiendo los dictados de Joe Duddell, preparando un master en el Royal College of Music, junto a Kenneth Hesketh, y gestión artística en el Royal Welsh College of Music and Drama. Sus primeras aportaciones las realizó en la BBC Radio 3´s Composer of the Week, compartiendo con otras cinco aspirantes ganando en 2015, el Future Womens Price. Su ópera de cámara The Knife of Dawn, sobre libreto de Tessa McWatt, está basada en la vida en presidio del activista Martin Carter, estrenada en 2016 en el Roundhouse.

Su obra The Spark Catcher fue estrenada en los BBC Proms, en 2017, inspirada en la poética de Lemn Sissay,  antes de ser registrada en cd (NMC), esos Proms a los que volverá en 2020, estrenando precisamente esta Tuxedo: Vasco da Gama, para orquesta, que remite al ideario artístico de Jean-Michel Basquiat y que resumen un total de 16 piezas destinadas a la BBC Symphony Orchesta, que dirigía Sakari Oramo, en el Royal Albert Hall, el 28 de agosto de aquel año, pieza densa y abrumadora con detalles acerados de potente energía sonora, dentro de una quietud expansiva. Kendall fue merecedora del Premio Hindemith (2022), de composición que concede el Schleswig-Holstein Music Fest., además de colaborar con el programa DMA (Doctor of Music Arts) de la Columbia University neoyorquina, al tiempo que recibía nominaciones a los Ivor Novello Price, en los The Ivors Classical Awards (2023). Recordamos de ella en las actividades citadas, su obra Vera (2008), en la que cada instrumento solista recreaba ambientaciones sonoras a través de series dodecafónicas.

Missy Mazzoli, quien nos había dejado noticia en un par de ocasiones, la citamos por aquella en las Xornadas Contemporáneas de 2022, incluyendo en programa  Set that on fire (2013), estreno en nuestro país y para no ser menos, en otro concierto de temporada, en enero de 2021, en el que también presentaba obra Sofía Oriana Infante- Gratulantes-, siendo su aportación de entonces Dark with excesive bright, inspirada en la poética de J.J. Milton (Lost Paradise), resultado de la colaboración del contrabajista de la RFG Carlos Méndez.  Con formación en las Universidades de  Boston y de Yale, ampliará en Europa en el Conservatorio de La Haya, siguiendo las docencias de L. Anderser, M. Padding, R. Ayres, D.Lang, M.Bresnick, A. J. Kernis, C. Fussell, R.Cornell, M. Amlin y J.Harbison, mientras preparaba responsabilidades en aventuras directoriales promoviendo la creación del Festival  MATA y participar en iniciativas profesionales en el Mannes College of Music-ambos en Nueva York-, preparando una nueva experiencia como compositora en residencia de la Gotham Chamber Opera; Music Theater-Group, la Ópera de Filadelfia y la Chicago S. O., y colaboraciones con el Kronos Quartet, el MET, el Whitney Museum of Art. La obra elegida en aquella ocasión, remitía curiosamente a la estética  de Basquiat- el neoexpresionismo nacido por aventureros como Julian Schnabel, quien muestra como obra emblemática El estudiante de Praga, por su gestualidad extravagante de grandes lienzos figurativos el arte urbano  de los grafitti, con un Basquiat, y su proyecto SAMO (Same Old Shirt), de 1977-,   un ejercicio de virtuosismo y desafío que requería una actitud de profunda concentración. Mazzoli, recibió cuatro nominaciones Price ASCAP; una beca Fullbright,  para ampliar en los Países Bajos. En su quehacer, busca la confluencia con las tendencias contemporáneas más dispares. Mazzoli, destacó por su participación en trabajos para el ballet como Orpheus Alife, sobre coreografía de Robert Binet y Rosamund Small, para el National Ballet de Canadá o The Listenerss, para solistas, coro y orquesta. River Rouge Transfigurations, encargo de la O. S. de Detroit, ahondaba en el mundo cerrado del Viaje al fondo de la noche, de L.F. Celine, reconvertido en la realidad aplastante de aquella ciudad de las industrias pesadas de la civilización norteamericana.

Florence Beatriz Price (1887/1953)- Sinfonía nº 1-, méritos adquiridos por ser la primera compositora negra aceptada como tal en repertorios sinfónicos, tras graduarse en el Conservatorio de Música de Nueva Inglaterra (Boston, Massachusetts), mientras mantenía una vida de equívocos con respecto a la sociedad de un entorno claramente conflictivo. En ese conservatorio, había tenido como maestros a los compositores George Chadwick y Fredercik Converse, probando a escribir su primer trío y una sinfonía, preparando su graduación en 1906.  En Arkansas (1910), recibirá el reconocimiento como responsable del Departamento de Música, período de crecientes conflictos sociales como las leyes segregacionistas Jim Crow.  Se trasladaría a Chicago en donde vivirá un mejor momento junto a Arthur Olaf Andersen, Carl Busch, Wesley La Violette y Leo Sowery, con los que compartirá estudios en el Musical College. Un período precario la obligará a probar en trabajos alimenticios como organista de sesiones de cine de filmes mudos, mientras componía songs de estilos comerciales de segura aceptación. Su encuentro con Margaret Bonds y la soprano Marian Anderson, le abrirá nuevas perspectivas de mayor ambición, presentado obras para los convocados por la Fundación Wanamaker.

La Sinfonía nº 1, será galardonada con un Primer Premio compartido con un tercero por la Sonata para piano, una sinfonía que tendrá su estreno por la Orquesta Sinfónica de Chicago, dirigida por Frederick Stock, el 15 de junio de 1933. Otras obras orquestales, también recibirán un trato de consideración, en interpretación de la WPA Symphony Orchestra (Detroit); la Chicago Women´s Symphony, manteniendo una actividad incesante de obras como himnos; conciertos para violín y piezas camerísticas o canciones. Entre esas obras de arraigo, destacan: Three Negro Dances; Songs to a Dark Virgin; My Soul´s Been Anchored in the Lord o Moon Bridge. La formación europea de sus obras, entronca con las raíces sureñas, ofreciendo un estilo reconocible  en cuanto al uso de ritmos y síncopas inspirados en la tradición de los blues.  Obras suyas fueron redescubiertas con posterioridad, gracias a los fondos de la Women´s Philharmonic (2001), que realizará un registro sobre compositoras de su entorno y el protagonismo de la pianista Karen Walwyn y The New Black Repertory Ensemble, en 2011, que se añadía a los de  2009, recuperados del olvido en una residencia abandonada en St. Anne Illinois, con docenas de partituras, entre dos conciertos para violín y su Cuarta Sinfonía. Una Sinfonía en sus cuatro tiempos destacando el Allegro ma non troppo   a modo de pincelada que puso razones al especie de himno coral, para resaltar en plenitud la Juba Dance de ritmos sincopados especie de marching- band hasta el Finale Presto de poderoso brío de conclusión que sugeriría un talante jazzístico.

 El siempre agudo Alex Ross, no dudó en poner en crítica su legado aludiendo precisamente a ese renacimiento nacido en Harlem y encabezado por Duke Ellington, bien definido por W.E, Du Bois y otros analistas de aquellas escuelas. Eco tendrá en el tratado de Paul Allen Anderson: Deep River (Río profundo) que contribuiría a abundar en el abismo entre los patrones de avanzadilla primeros y las jóvenes tendencias de los Langston Hughes y Zora Neale Hurston.  De Bois había pretendido junto a sus inseparables colegas, una fusión más híbrida de ideas afroamericanas, europeas o americanas sin menores reparos. Otro analista, Alain Locke, tensará la cuerda mostrándose receloso del jazz comercial, apostando abiertamente en sus simpatías por las obras de corte sinfónico que se propone en las obras de William Grant Still; William Dawson y nuestra Florenc Beatriz Price.

Ramón García Balado       

 

Real Filharmonía de Galicia /  Sebastian Zinka

Obras de Hanna Kendall, Mizzy Mazzoli y Florence Price

Teatro Afundación, Vigo

Auditorio de Galicia, Santiago de Compostela                                            

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