No fue el “Coriolano” de Shakespeare la inspiración directa para la obertura del mismo nombre de Beethoven; en cambio, la obra fue escrita para acompañar el casi olvidado drama Coriolan de Heinrich Joseph von Collin, que fue revivido en el Burgtheater de Viena en 1807. La música de Beethoven describe la historia de Coriolanus en un ensayo a menudo tormentoso cuya evolución refleja la acción en el drama.
La obertura sonata-allegro comienza oscuramente, a continuación, las cuerdas retoman una figura rítmica y agitada que constituye la parte principal del primer tema. La orquesta representa perfectamente el carácter orgulloso de Coriolanus, su desafío y naturaleza inestable; anhela, medio grita, pero se las arregla para sonar sumiso, como gobernado por alguna oscura restricción interior. Aparece un segundo tema, una creación memorable de gran belleza lírica que también posee un elemento inconfundiblemente heroico, un rasgo casi omnipresente en Beethoven.
Paul Lewis y Jirí Belohlávek han producido en grabación un conjunto de la integral de los “Conciertos para Piano” de Beethoven que pone más cerca a sus raíces clásicas de la época mientras que transporta una sensación de emoción en Beethoven atrevida innovadora en la escritura. Aquí el pianista de Liverpool revive su plasmación en disco con una lectura teatralmente dramática de estas obras; hasta se podría decir que conservadora, pero no tanto como para que el oyente no pueda evitar sentirse conmovido por el emocionante final del “Concierto del Emperador” o atrapado en la energía del movimiento de apertura del “Concierto nº1”.
Lewis impone su fuerza que contagia a la orquesta, dando elegancia y gracia a los movimientos lentos con un toque maravillosamente legato. Sin embargo, sabe cómo cambiar su articulación para ayudar a cambiar el carácter y la forma de cada frase a lo largo de los conciertos, agregando interés a la música sin exagerar ningún drama.
Su técnica es esencialmente genial e impoluta y su tono es sorprendentemente colorido. Él y Grau trabajan bien juntos en esto, ninguno de los cuales es indulgente, y el director mantiene los colores orquestales muy en línea con el piano; un acompañante ideal, fuerte pero solidario y siempre un socio pleno. Su interpretación suena completamente natural al estilo de Beethoven, desde el primer hasta el último compás. El sonido es muy claro y presente, e igualmente equilibrado entre la orquesta y el piano, con la acústica excelente que conlleva la sala elegida.
Luis Suárez
Paul Lewis, piano.
Franz Schubert Filharmonia.
Tomás Grau, director
Beethoven, Conciertos para Piano y Orquesta.
09/10/2021
Palau de la Música, Barcelona