Contundente espectáculo y versión (con las lógicas limitaciones de la “versión de concierto”, en este caso semi-representada eso sí, pero con estudiado acierto dramático, gusto y sana vocación pedagógica) del Fidelio de Beethoven en esta vistosa inauguración de la temporada sinfónica de la Orquesta y el Coro Nacionales de España dirigidos por su titular David Afkham.
Magnífico resultado, pues, sin más paliativos. Un umbral de temporada que nos deja buen sabor de boca en este momento inicial, siempre de máxima expectación.
Un patente incentivo, el previo (reflejado en la cantidad y relativa variedad de público asistente), durante (en, también, relativo silencio respetuoso) y el posterior a una velada estimulante.
Una velada que, dicho sea de paso, en mi caso particular presencié en su pase de (inusitada) tarde de domingo. Por una vez (alguna más ha habido ya), el concierto en domingo de temporada tuvo consideración con las voces y llevó su horario, de la tradicional mañana a una tarde más desahogada, con las cuerdas vocales de coro y solistas a punto.
Siempre he comentado que hay obras dramáticas que permiten y/o justifican mejor que otras, una versión de concierto de la partitura íntegra. Y ésta, sin duda, es una de ellas, especialmente en su espectacular tramo final, casi un oratorio profano de exaltación unánime de la libertad, del coraje y de una fidelidad aquí, además, onomástica y titular.
Voces convincentes en sus papeles principales por dicción, proyección vocal (con alguna aislada excepción exculpada por la dificultad resuelta y presencia de su parte), dominio de la partitura y carácter.
Una vuelta de tuerca más de identificación incluso, si tenemos en cuenta que la verdadera protagonista de la obra, Leonor, coincidía con el nombre de pila de la cantante que lo encarnó en esta ocasión con semejante vigor y entereza.
Si bien, la carga canora que la partitura exige de algún personaje, más sufrido que éste en el espléndido desarrollo final de la trama, se compromete antes por encima de otros roles titulares, más aparentes a la postre.
Encomiable desempeño de coro y orquesta con Afkham al frente: limpieza tímbrica, plasticidad y ajuste destacados en una obra de proporciones monumentales para este marco.
Un brillante arranque de una temporada que esperamos obtenga, así, sus frutos colaterales de expectación y afluencia durante toda ésta.
Luis Mazorra Incera
Orquesta y Coro Nacionales de España / David Afkham.
Maximilian Schmitt, Florestan; Eleanor Lyons, Leonore; Peter Rose, Rocco; Werner Van Mechelen, Pizarro; Elena Sancho, Marzelline; Roger Padullés, Jaquino; Matthias Winckhler, Don Fernando; Joaquín Notario, Narrador; Fernando Aguilera, Prisionero 1; Federico Gallar, Prisionero 2.
Fidelio de Beethoven.
OCNE. Auditorio Nacional de Música. Madrid.