Nueve conciertos se han programado en el Festival Contemporáneo de Alicante del presente año en el que se ha homenajeado la figura de Óscar Esplá, interpretándose su obra completa para piano como referente de su pensamiento musical. Tal intención del festival se ha reflejado en este concierto con una preciosa transcripción realizada por Castelló Rizo de la quinta pieza, Antaño, de su colección para piano, Impresiones Musicales (Cuentos infantiles), que Monastrell Ensemble interpretó como bis con emocionado sentido y gran delicadeza.
Este grupo es un quinteto de viento clásico formado por catedráticos del Conservatorio Superior de Música ‘Óscar Esplá’ de Alicante que se conocen musicalmente a la perfección dado el excelente resultado de la interpretación de este programa dedicado a cuatro compositores levantinos junto a una obra de Joan Magrané. Se inició con la pieza para oboe solo Do ut Des realizada en 2017 por Sixto Herrero en la que el instrumentista Pedro Herrero pudo demostrar el paralelismo de su capacidad estética con sus dotes técnicas, especialmente en las modificaciones del sonido natural de su instrumento (imitativos y percusivos) desplegando toda una amplia exploración expresiva de las posibilidades sónicas y musicales del oboe en sus casi diez minutos de duración.
La segunda obra del programa fue un trío, en el que se incorporaron los profesores F.J. Fernández-Vicedo y D. Baixauli, escrito por el músico de la comarca alicantina del Alto Vinalopó, J. Bautista Francés Parra, bajo el título Trinus (2015) en la que se pudo admirar su dominio del contrapunto llevado a un lenguaje musical contemporáneo de inquietante efecto. Una serie de células melodiosas se fueron intercambiando entre los tres instrumentos antes de pasar a un pasaje sereno que dio lugar a una especie de pasacalle final y apuntar un esbozo de recapitulación. Sus ocho minutos de duración son suficientes para apreciar las múltiples mixturas y combinaciones tímbricas.
La composición Dédalo de Amando Blanquer escrita en 1979 ocupó el tercer lugar del programa. Es un dúo para clarinete y piano que destaca por su sentido vanguardista sin dejar de tener ciertas influencias tonales, en un ejercicio de exposición de las posibilidades expresivas de ambos instrumentos aplicadas a un bien estructurado discurso conjunto, que se iniciaba con una búsqueda de orientación antes de la disolución de su laberíntico y misterioso inicio. El clarinete tomó la iniciativa, articulando el piano a modo marcato como sustento del desarrollo del clarinete antes de entrar en plenitud expresiva en un distinguible tercer episodio. Le siguió un pasaje lírico bien cantado por el clarinetista. La obra termina con un sugestivo aire evocador para finalizar en una sorprendente conclusión tonal, todo un guiño a estéticas pretéritas.
La penúltima obra fue Un tapís (L’unicorn) del compositor reusense Joan Magrané. La mayor complejidad de este quinteto respecto a las piezas anteriores sirvió para ver el alto grado de conjunción técnica de Monastrell Ensemble basado en una contrastada académica experiencia clásica. En sus casi ocho minutos de duración se pudieron apreciar las distintas partes de esta obra, que se inicia con una búsqueda de sonoridad por parte de cada instrumento a base de destacar sobre mixturas conjuntas, resolución de frecuencias, relevos expresivos y sucesión de enlaces. En uno de sus pasajes se percibía la aparición del canto en el oboe, que venía a ser contestado por la flauta y el clarinete para dejar que el fagot ejerciera la función de un muy contrastado acompañamiento. La parte final de esta obra, de unos ocho minutos de duración, sorprendía con una especie de coral de cierta aproximación tonal desde una destacada armonización protagonizada por la flauta y el clarinete antes de su condensado episodio final.
Todos los intérpretes integraron la interpretación de la obra más larga del programa: Chuang Tzu y la mariposa del valenciano Enrique Sanz-Burguete, compositor de muy reconocido vanguardismo. En sus distintos episodios, que se inician con una clara alusión a un tema de Noches en los jardines de España de Manuel de Falla, se desgrana musicalmente el sueño del poeta y filósofo chino del siglo IV a.C. Zhuangzi, una de las figuras primigenias del taoísmo. Distintas técnicas de acción instrumental contiene esta obra de fragmentaria y a la vez sólida estructura en una clara intención de mantener unos contrastes expresivos que se manifiestan desde una pequeña preparación del piano, hasta la desnaturalización del sonido de cada instrumento de viento, la aparición de nuevos efectos (percusivos de las llaves o simples soplidos) y el mantenimientos de un constante efecto rítmico antepuesto a la etérea y, a veces, ampulosa sonoridad del piano en su envolvente función resonante facilitando así la percepción del oyente. La sensación que produjo esta interpretación fue el resultado del convencimiento de los seis protagonistas de la bondad musical de esta obra, alto grado de conjunción en el grupo y la clara distinción de la musicalidad de cada instrumentista en el leguaje contemporáneo.
Este concierto ha servido para poner en valor la creación e interpretación de los músicos levantinos que tanto significan y han aportado a la música española como lo fue Óscar Esplá, compositor que debería dar nombra al renacimiento del que llegó a ser el festival de música contemporánea más importante de España y que, con buena intención y mejor criterio, quiere el maestro Josep Vicent, director artístico del ADDA, recuperar como renovado referente cultural para Alicante.
José Antonio Cantón
Auditorio de la Diputación de Alicante (ADDA).
21-IX-2021. Festival Contemporáneo de Alicante 2021.
Monastrell Ensemble. Ana Mª Alcaraz Segura (fl.), Pedro Herrero (ob.), Francisco J. Fernández-Vicedo (cl.), David Baixauli (fg.), Eduardo Gabriel (tpa.) y Jesús Gómez (p.). Obras de Amando Blanquer, Juan B. Francés Parra, Sixto Herrero, Joan Magrané y Enrique Sanz-Burguete.
Foto: Monastrell Ensemble.