LLega el verano y Huelva alcanza hitos. Conciertos y festivales son la oportunidad para que los onubenses se deleiten con artistas de talla internacional. El Festival de música de cámara de Isla Cristina es una apuesta prometedora que ya ha trascendido la provincia. Esta tercera edición ha echado a andar con música barroca, servida en formato camerístico haciendo puente con el futuro cuarteto clásico. El Settecento llegó al público en repertorio transparente. Y con acierto el programa de los solistas de la Orquesta barroca de Sevilla alternó obras de protagonismo solista con otras de gran valor contrapuntístico.
Resaltamos de la velada el cuerpo central. La obra de Corelli empezó envolviendo al auditorio para después mostrarse la excelencia de violines y la viola; en los movimientos rápidos se diferenciaba perfectamente las texturas de cada voz a la manera de un mosaico. Por su lado, el opus 2 nº 2 de Albinoni nos sorprendía con esa inconfundible solemnidad de las magistrales partituras venecianas.; aquí Suyeon Kang fraseó exquisitamente la línea melódica, después un contrapunto de máximo control gracias a la dinámica de forte y piano; lo que deparó una versión deliciosa y sentida.
La coreano-australiana convenció en los conciertos de Vivaldi donde era protagonista. Austero el opus 9 nº 3, cuyo movimiento central suscitó ese ensimismamiento de il prette roso que deja absorto a teatros enteros; y muy preciso el Sexto de L´estro armonico, que se ha hecho muy popular entre todos los públicos. En cuanto al concierto en la mayor de Albinoni reservó sus poderosos recursos, principalmente en el primer movimiento, de trazos luminosos degustado en un juego de arpegios.
Soberbia la participación del chelo, cimiento infalible de un bajo continuo que apuntalaba al discurso en todo su desarrollo. Sí echamos en falta imaginación en el clave, principalmente en las ricas variaciones de La Follia. Como pequeñas aristas, el Finale del opus 9 nº 4 de Albinoni, de tempo renqueante y la corpulencia de la sonata de Vivaldi, más grande de lo prescrito.
Fue un estímulo un abundante aforo al reclamo de este concierto, algo que permite crecer, con paciencia, la respuesta del respetable a un repertorio selecto como es la música de cámara.
Marco Antonio Molín Ruiz
III Festival de Música de Cámara de Isla Cristina. Solistas de la Orquesta Barroca de Sevilla. Solista: Suyeon Kang (violín).
Sonatas y conciertos de Corelli, Albinoni y Vivaldi.
Teatro “Horacio Noguera” de Isla Cristina.
Foto © José Manuel Crenes Díez