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Críticas seleccionadas de conciertos y otras actividades musicales

 

Crítica / Contemporaneidad, romanticismo y hechizo… - por Verónica García Prior

Málaga - 04/04/2022

El pasado 31 de marzo, el Teatro Cervantes de Málaga -sede escénica habitual de la Programación de la Orquesta Filarmónica de Málaga- acogió el noveno Programa de su Temporada que integró obras de Gabriel Bussi, Robert Schumann y Nicolai Rimsky-Korsakov.

El concierto estuvo acertadísimamente precedido por una conferencia  (en la Sala Rossini del propio Teatro) a cargo del violinista, director de orquesta y compositor uruguayo Gabriel Bussi y del libretista gallego Javier Ozores Marchesi. Gracias a esta charla, el público asistente pudo conocer interesantes y curiosos detalles sobre la gestación del drama musical en tres actos del propio Bussi, La Tribuna, cuyo libreto está inspirado en la obra homónima de Emilia Pardo Bazán.

Sería la Suite sinfónica de La Tribuna, emanada de la ópera de Gabriel Bussi, la que ocupó la primera parte del Concierto y cuyos cuatro movimientos (I. Obertura y enamoramiento; II. Amparo con las cigarreras en la fábrica y el himno a la libertad; III. Nana de Amparo; IV. La llegada de la Unión del Norte y la ruptura de Baltasar), fueron dirigidos por la batuta del Maestro José Mª Moreno. Fue destacado ver entre los atriles de la OFM al compositor de la Suite actuando de violinista y estrenando el segundo movimiento de su propia composición.

La música del compositor G. Bussi es universal, muy cantable, entendible y fácil de llegar al público. Quizás esa facilidad de conectar y de ser capaz de llegar a todos se deba a su paso por distintos continentes donde ha vivido y se ha formado, ampliando así su horizonte no sólo humanístico, sino también musical. Bussi ofrece con su composición una música muy humana, capaz de traspasar espacio y tiempo. Su ópera La Tribuna (de la que deriva su Suite orquestal) no es una ópera contemporánea al uso, sino versátil por su curiosa instrumentación, sus interesantes contrastes (tan pronto expone la música en calma o recrea un alboroto mediante la utilización de notas falsas a propósito) o por la inclusión de una Nana dentro de esta obra cuyo origen es operístico.

Tras La Tribuna, la batuta del Maestro José Mª Moreno se dedicaría a los tres movimientos del Concierto para violonchelo y orquesta en La menor, Op. 129 de R. Schumann (1810-1856), tocados sin pausa, tal y como el propio compositor concibió la obra.  El violonchelo solista fue el del prestigioso Asier Polo que interpretó con gran expresividad y virtuosismo este concierto con un Francesco Rugieri (Cremona 1689) cedido por la Fundación Banco Santander.

Durante los veinticinco minutos de música ininterrumpida de Schumann, Asier exhibió una increíble técnica así como un sonido de una brillantez da Chiesa (propia de este tipo de instrumentos de la época) que engalanó su ya emocionada y expresiva interpretación. La gestualidad del chelista y su música formaban una sola pieza henchida de fuerza y sensibilidad, las notas eran palabras contoneándose en el pentagrama para dar locución al más creíble verbo musical.  El concierto schumanniano -concebido para el despliegue técnico y virtuoso del chelo- mostró a uno de los mejores chelistas de su generación. Asimismo, la compenetración musical entre solista y orquesta fue excepcionalmente ordenada por José Mª Moreno.

Como bis de la primera parte, el bilbaíno Asier Polo (al que compositores como L. de Pablo, Antón García Abril, J. Villarojo o G. Erkoreka le han dedicado alguna de sus obras) regaló al público la Sarabanda de la 3ª Suite de J. S. Bach (1685-1750) en una interpretación magistral que podríamos resumir  afirmando que “el alma de Bach se reencarnó en el chelo de Asier Polo”. Su madera vibró y transmitió como un solo cuerpo, intérprete e instrumento aunados en sí. Su chelo inundó virtuosamente todo el espacio cervantino y dejó conmocionado a un público que contuvo la respiración ante tan bella interpretación.

La segunda parte del programa se centró exclusivamente en la literatura musical europea, de aroma oriental pero de pentagramas de instrumentación rusa, como fue Scheherezade, Op. 35 del compositor ruso Nicolai Rimsky-Korsakov (1844-1908).

Una Scheherezade que embrujó al público y en la que sobresalió su concertino, Andrea Sestakova, que sedujo al auditorio con su delicada y elegante técnica violinística, reapareciendo con su tema principal presentado de “Mil y una maneras diferentes”, muy acorde a la temática o leit motiv sobre el que Rimsky- Korsakov creó esta bellísima composición. Las hipnóticas notas de Sestakova conformaron una narración tan seductora como las imaginadas historias que encandilaran al consabido rudo Sultán. El exótico relato musical viajó hacia los escuchantes en una nube armónica entregada por una Filarmónica plena en la tímbrica.

En el Largo e Maestoso- Allegro non troppo de la composición surgen los metales y los viento-madera para representar a ese Sultán duro, mientras el violín nos embarca en “El mar y el barco de Simbad”. La escena musical conseguida por la delicada y, a su vez,  pasional batuta del Director capitaneó un hermoso y ensoñado viaje musical cargado de exotismo.

Los suaves acordes del arpa acompañan a nuestra Scheherezade concertino para iniciar el segundo movimiento: Lento-Andantino- Allegro molto con moto que se corresponde con el episodio de “El cuento del príncipe Kalender”. Este delicado y a la vez vigoroso movimiento reunirá un maravilloso crisol tímbrico en donde encontraremos desde la delicadeza cantábile de las maderas y cuerdas, pasando por delicados redobles de los timbales y las “batallas” presentadas como fanfarrias de metales, hasta llegar a la simulación de una especie de rasgueo de guitarra por parte del tutti orquestal. Los metales también simularon el efecto de bandas de música en una eficiente recreación de un ambiente alegre y belicoso a la vez. La cadencia final nos muestra a unas cuerdas enfurecidas (resaltadas por los acordes de los metales y los golpes de timbal) que, posteriormente, se alejan delicadamente con la ayuda del arpa y los violines. Esa lejanía se ve acentuada por el cuasi eco de la trompa con el tema de la batalla y los pizzicati de las cuerdas inician el camino de un poderoso in crescendo del tutti orquestal, preciso y expresivo, que redondeó una igualable interpretación.

Y tras el torbellino y la explosión sonora del movimiento anterior, le llegó el turno a los delicados y románticos pasajes del tercer movimiento, Andantino quasi allegretto, que transcribe musicalmente la historia de “El joven príncipe y la joven princesa” cargada de orientalismo, si bien algunas cadencias puntuales bien pudieran recordarnos a algún tipo de música americana o incluso a una España “exótica” merced a unas notas de trompeta que se me antojan similares a las de un pasodoble. Recursos musicales que son evocadores de lugares lejanos, pero también contrastantes en donde las cuerdas y las maderas de los jóvenes amantes contrastan con los pizzicati, caja redoblante o los metales de forma puntual. En este relato musical descolló una Scheherezade que se alza con el poder, pues la concertino trae al frente al personaje e interpreta sus compases como si de un concierto de violín se tratara.

En el cuarto y último movimiento Allegro molto- Vivo-Allegro non troppo e maestoso (“Festival en Bagdad. El mar. El barco coronado por un guerrero de bronce se estrella contra un acantilado”) la OFM entra de pleno presentando el tema del Sultán, con la sección de cuerda al completo, y, en contraste, de nuevo la delicada Scheherezade concertino. La orquesta expone, en una acumulativa progresión instrumental y con un marcado carácter bailable, el tema de la fiesta…

Jose Mª Moreno, así como sus músicos y solistas hechizaron al público con un concierto en el que la contemporaneidad, el romanticismo y el orientalismo hicieron una trenza musical a la que el público respondió con cinco minutos de apasionados aplausos y sonadas ovaciones.

Verónica García Prior

 

Orquesta Filarmónica de Málaga / José María Moreno

Asier Polo, violonchelo

Obras de Gabriel Bussi, Robert Schumann y Nicolai Rimsky-Korsakov

Programa 09 de la Temporada de Abono

Teatro Cervantes, Málaga

 

Foto © Daniel Pérez

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