El “Proyecto-Zarza” continua su andadura con pie firme, poniendo sobre las tablas del Teatro de la Zarzuela (nueva producción propia) una obra que es todo un caramelo para cualquier espíritu creativo y re-creativo (como sería éste el caso), La Gran vía: una “revista madrileña cómico-lírica, fantástico-callejera en un acto” (sic) con música de Federico Chueca y Joaquín Valverde, y libreto de Felipe Pérez y González (en versión de Enrique Viana).
No solamente una “página en blanco”, que lo es, sino toda una inspiración y motivo de retranca realista o surrealista, y, por supuesto, sana y contundente vis cómica.
Si ya la ensalzó (nada menos que) un Friedrich Nietzsche tocado por una representación que, por lo visto (por lo leído, más bien), presenciara en Milán (!) (desconozco si, también, adaptada a su contexto italiano-milanés…); que no nos sorprenda ahora con paso acomplejado… (¡algo tendrá el agua cuando la bendicen!).
Y, siguiendo a Nietzsche, todo un ejercicio de voluntad, de empeño por divulgar nuestro legado músico-dramático, contra siniestros vientos y mareas globalistas o, directamente… ignorantes. Un empeño que, por sólo citar un ejemplo al paso, en el día de autos en que nos personamos en el Teatro (mañana de sábado), recibía con orgullo (como bien se dijo en el coloquio posterior) una amplia afluencia escolar murciana en alturas de paraíso.
Buena puesta en escena, dirección y escenografía ejemplar en muchos sentidos, fluida, imaginativa… sorprendente incluso…; buena interpretación instrumental desde el foso por miembros de la JONDE (Joven Orquesta Nacional de España) y, ante todo, un excelente desempeño de todo el elenco sobre las tablas.
Un elenco canoro y actoral que brilló en todas las facetas y, en especial, en materia musical (por afinación, equilibrio, concertación rítmica, voz incluso… musicalidad en suma), con números memorables que dejaron el listón tan alto que hasta podrías pensar que ensombrecieron el resto de la representación que les seguía. Números iniciales, destacados por su inspiración original en partitura o por la oportunidad y ajuste de la versión, o ambas en conjunción (que será el tema), como el tan trillado vals del Caballero de Gracia.
Enhorabuena a todos en todas sus facetas: danza y coreografía, música, vis cómica, dramaturgia… Un buen desempeño sobre una obra sufrida e imperecedera que aún hoy mantiene la enorme generosidad de adaptarse con extrema facilidad a cualquier circunstancia, a cualquier reescritura o versión actualizada: de Gran vía a Montera, de Libertad a Espartero… “¿Espartero? ¿el torero? (...) ¿el constante liberal? ¡Ya no hay d’ese percal!”
Luis Mazorra Incera
Proyecto-Zarza (“zarzuela por jóvenes y para jóvenes”).
Dirección musical, Néstor Bayona; dirección de escena, Enrique Viana; escenografía, Carmen Castañón; vestuario, Gabriela Salaverri; iluminación, Alfonso Malanda; coreografía, Cristina Arias; visuales, Alba Trapero.
Orquesta de cámara (miembros de la JONDE).
Reparto: Rosa María Abella, Lucía Beltrán, Arantxa Cooper, Albert Díaz, Marina Fita, Yasmín Forastiero, Iago García Rojas, Rosa Gomáriz, Iría Goti, Luis Maesso, Alicia Moreno Royo, Álex Parra, Nacho Quiñonero, Adrián Quiñones, Andrea Rey, Miguel Ángel Roldán, Miriam Silva, Marcelo Solís, Rodrigo Turégano y Nacho Zorrilla.
La Gran Vía [Proyecto Zarza] con música de Federico Chueca y Joaquín Valverde y libreto de Felipe Pérez y González, en versión de Enrique Viana.
Teatro de la Zarzuela. Madrid.
Foto © Elena del Real