Joan Enric Lluna y Josu De Solaun presentaron con un recital el disco Spiritual Wings [Alas espirituales], publicado en Sony Classical, en la sede de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) en Madrid, el martes 21 de mayo.
El clarinetista y el pianista, único español que ha ganado el Premio Iturbi de Valencia y el George Enescu de Bucarest, así como dos Premios Internacionales de Música Clásica (ICMA); ofrecieron una breve actuación con la música que recoge este trabajo, piezas crepusculares, de “absoluta madurez”, y de juventud de Johannes Brahms (1833-1897) con el que los músicos valencianos inician su colaboración artística.
El acto, organizado por Miotta & Molière, concitó a numerosas personalidades del mundo de la música que llenaron el aforo de la sala Manuel de Falla del Palacio Longoria. El álbum, publicado por el sello Sony Classical y disponible en las principales plataformas digitales del mundo, incluye las obras de Johannes Brahms (1833-1897), Sonata opus 120 número 1 en fa menor, la Sonata opus 120 número 2 en Mib mayor y la Serenade - Suite, con los arreglos de Lluna para clarinete y piano a partir de la Serenata 1 opus 11 y Serenata 2 opus 16, y ha sido producido por el músico e ingeniero de sonido Fernando Arias.
Proyecto singular y necesario
En la presentación del cd intervinieron Lluna, De Solaun y el crítico y ensayista musical Juan Ángel Vela del Campo. Lluna asegura que “este disco recoge dos obras fundamentales del repertorio de cámara para clarinete” y destaca que “grabar este trabajo con Josu De Solaun, uno de los grandes pianistas de la actualidad, ha sido un tremendo aliciente y el proceso ha sido fascinante”. De Solaun considera que “las dos sonatas de Brahms son dos de las grandes obras de la historia de la música, tienen un lirismo casi devocional, lleno de amor, recogimiento e intimidad, y con una especie de dignidad casi estoica”.
Por su parte, Vela del Campo expone en el libreto que en el disco hay “toda una vida, en una creación tan interiorizada como profundamente reflexiva. Brahms en su plenitud absoluta” en una grabación de “dos magníficos intérpretes, artífices de este proyecto tan singular como necesario, tan sutil como preciso”.