Madama Butterfly de Puccini vuelve al Liceu con la dirección de Paolo Bortolameolli y producción de Moshe Leiser y Patrice Caurier con un total de 15 funciones (la primera de ellas Under35). La ópera Madama Butterfly se ambienta en Nagasaki, a finales del siglo XIX, en el momento en que Japón se abre al mundo y Occidente descubre su singular sensibilidad cultural. Esta producción combina la estética tradicional japonesa con un realismo esmerado en la representación de los valores éticos del Japón medieval.
Aclamada desde su estreno en el 2003, esta producción ha sido destacada como una de las más exquisitas y fieles al espíritu de Puccini. Será la cuarta vez que sube al escenario del Gran Teatre del Liceu, reafirmando su sitio como una de las más queridas del repertorio operístico.
Para las catorce funciones programadas entre el 9 y el 28 de diciembre (previa exclusiva para el público LiceUnder35 el 8 de diciembre), el Liceu ha reunido un reparto de alto nivel. El rol principal será interpretado por tres sopranos de gran prestigio: la búlgara Sonya Yoncheva, la madrileña Saioa Hernández y la americana Ailyn Pérez, todas en momentos destacados de sus carreras. La dirección musical estará a cargo del maestro Paolo Bortolameolli.
El reparto se completa con destacados cantantes en otros papeles principales: el rol de Pinkerton, escrito para tenor spinto , será interpretado por Matthew Polenzani , Fabio Sartori y Celso Albelo ; Suzuki, por las mezzosopranos Gemma Coma- Alabert , Annalisa Stroppa y Teresa Iervolino ; y Sharpless, por los barítonos Lucas Meachem , Thomas Mayer y Gerardo Bullón . Goro será defendido por Juan Noval Moro y Pablo García-López, mientras que los papeles de Yamadori , el Tío Bonzo y Kate Pinkerton serán interpretados por Carlos Cosías , David Lagares y Montserrat Seró, respectivamente.
Con una fiel escenificación en Japón del siglo XIX y una cuidada dirección artística, esta producción promete una experiencia musical y visual única para los amantes de la ópera.
Producción
La producción de Madama Butterfly dirigida por Moshe Leiser y Patrice Caurier, creada en 2003 en colaboración entre la Royal Opera House de Londres y el Gran Teatre del Liceu, se ha consolidado como una de las escenificaciones modernas más solicitadas de esta ópera icónica. En Barcelona, ésta será su cuarta reposición (temporadas 2005/06, 2012/13, 2018/19 y 2024/25), mientras que en Londres ya acumula diez representaciones. La ambientación historicista traslada fielmente la acción a finales del siglo XIX, reflejando la fascinación occidental por el Japón de la época. La escenografía de Christian Fenouillat recrea con detalle las casas tradicionales japonesas, mientras que el vestuario de Agostino Cavalca, tanto japonés como occidental, aporta autenticidad al relato.
Esta producción destaca no sólo por su belleza visual, sino también por la profundidad ética de su relato. La protagonista, Cio-Cio-San, asume su trágica decisión final con un sentido del honor japonés que culmina en un ritual de seppuku. El contraste entre la elegancia estética y la intensidad emocional del drama hace de esta versión una de las más memorables y fieles al espíritu de la obra maestra de Puccini, quien la consideraba la mejor de todas sus creaciones.
La música
El papel de Cio-Cio-San, protagonista de Madama Butterfly, es uno de los más exigentes del repertorio operístico. Requiere una soprano con un timbre de voz delicado, técnica impecable y una interpretación actoral excepcional. Además, la exigencia física es considerable: Butterfly permanece casi toda la obra en el escenario, sosteniendo la acción dramática y musical en un intenso arco emocional que culmina con la catarsis final. Esta intensidad ha llevado a muchas cantantes a dosificar este rol a lo largo de su carrera, puesto que su complejidad física y emocional es única.
Argumento
Madama Butterfly cuenta la historia de Cio-Cio-San, una joven japonesa que se casa con B.F Pinkerton, un teniente americano destinado a Nagasaki . Para ella, el matrimonio es sagrado, pero para él es sólo un pasatiempo. Pinkerton se va tras satisfacer sus deseos y promete volver, pero pasan tres años y no lo hace. Cuando reaparece, ya se ha casado con otra mujer y viene a reclamar al hijo que Cio-Cio-San tuvo en secreto. Humillada, ella acepta entregarle el niño y se quita la vida con la espada de su padre. La ópera aborda temas universales como el choque cultural, la falta de empatía y las relaciones tóxicas, todo ello con una música magistral que combina crueldad y compasión.
Foto: Matthew Polenzani, Sonya Yoncheva y Paolo Bortolameolli, en el escenario del Liceu / © www-sergipanizo-cat