Como #lecturasdeverano, continuamos con la publicación en abierto de las distintas entrevistas realizadas en la sección “Contrapunto”, publicadas en nuestra revista RITMO en su edición de papel, a personalidades de la cultura, y que solo estaban disponibles en dicho formato. En esta ocasión publicamos la realizada para la revista de abril de 2023 (por Gonzalo Pérez Chamorro)
JESÚS RUIZ MANTILLA
Nuestro contrapunto de abril presenta a un periodista cultural con una larga carrera en El País y autor de varias novelas y ensayos, que acaba de publicar Divos (Galaxia Gutenberg), donde los más grandes cantantes del momento revelan testimonios de primera mano sobre el mundo de la ópera en el siglo XXI.
por Gonzalo Pérez Chamorro
¿Recuerda cuál ha sido la última música que ha escuchado?
A Bunbury.
¿Y recuerda cuál pudo ser la primera?
Juanita Banana.
Teatro, cine, pintura, poesía… ¿A qué nivel pondría la música con las demás artes?
Al de la poesía, sin duda.
Qué habría que hacer para que la música fuera pan de cada día…
Yo creo que lo es, pese a que algunos se empeñen en lo contrario.
¿Cómo suele escuchar música?
Ahora por Spotify, allá donde me encuentre, con mis cascos o en casa.
¿Qué ópera (o cualquier obra musical, etc.) le hubiera gustado componer?
Tristán e Isolda.
¿Qué personaje le hubiera gustado cantar o interpretar en el escenario?
Rigoletto.
¿Teatro o sala de conciertos favorita?
El Teatro Real.
¿Un instrumento?
El piano.
¿Y un intérprete?
Daniel Barenboim.
¿Un libro de música?
Viaje musical por Italia y Francia, de Charles Burney.
Por cierto, qué libro o libros tiene abierto ahora en su mesa de lectura…
Madrid, 1940, de Francisco Umbral y Extrañas, de Guillermo Arriaga.
¿Y una película con o sobre música?
Amadeus, de Milos Forman.
¿Una banda sonora?
La lista de Schindler, de John Williams.
¿Cuál es el gran compositor de música española?
Manuel de Falla.
¿Una melodía?
Hey Jude, de los Beatles.
¿Con qué música le gustaría despedirse de este mundo?
Con el último movimiento de la Tercera Sinfonía de Mahler: Langsam. Ruhevoll. Empfunden, que quiso describir con este enunciado: “Lo que el amor me enseña”.
¿Un refrán?
En casa del herrero…
¿Una ciudad?
Santander.
Divos, su último libro, cuéntenos el por qué…
Miré atrás y comprobé que había entrevistado a los mejores cantantes de la época presente. Todos ellos conformaban tres generaciones y una visión colectiva fascinante y de primera mano sobre el mundo de la ópera en el siglo XXI. Ha sido más que gozoso escribirlo.
Por cierto, ya que ha abierto el melón, ¿la crítica y el periodismo pueden sufrir de “divinitis”?
Más que los que se la juegan en el escenario, sobre todo la crítica. Y no entiendo por qué.
¿Cuál de sus libros es su niño bonito?
Por Dios, no me haga esa pregunta… ¡Todos!
¿Qué cree que le sobra a este país? ¿O qué le falta?
En Madrid sobra elitismo impostado y fuera de lugar, es decir, eso implica lo contrario y así redondeamos la pregunta: que le falta conectar con la realidad y otros públicos.
Háblenos de un trance cultural o musical en su vida que se le haya quedado grabado…
Los conciertos de piano de mi tío José Francisco Alonso, a los que me llevaban mis padres cuando era niño.
Si pudiera retroceder a un momento de la historia de la humanidad, ¿dónde iría Jesús Ruiz Mantilla?
A la Revolución francesa.
¿Qué cosa le molesta en su vida diaria?
Ser esclavo del teléfono móvil, con todo lo que el aparato diabólico implica.
Cómo es Jesús Ruiz Mantilla, defínase en pocas palabras…
Sereno y rabioso a partes iguales. Disfrutón, hedonista, temperamental, comprometido, desquiciantemente paradójico, flexible, escéptico ya, todavía más idealista que nihilista. Aprendiendo a ser libre, que no es fácil y no sé si lo lograré.
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