Los días 18, 20 y 21 de mayo, el Teatro Real ofrecerá cuatro funciones del ballet clásico Giselle interpretado por la Compañía Nacional de Danza, en la versión coreográfica de su director, Joaquín de Luz, inspirada en el romanticismo español y en la poesía de Bécquer.
Sin abandonar los elementos que han hecho de esta obra una de las cumbres del ballet clásico, la concepción de Joaquín de Luz recoge también la escuela bolera y las tradiciones españolas, y construye una Giselle más humana, más tangible, apoyada en la dramaturgia de Borja Ortiz de Gondra, que la dota de mayor contenido argumental, sin desvirtuar la esencia de la historia romántica que todos conocemos.
La narración transcurre en una aldea de la Sierra del Moncayo, imaginada por la escenógrafa Ana Garay junto a los bellos figurines de la diseñadora Rosa García Andújar y la iluminación de Pedro Chamizo. Juntos nos trasladan a un lugar en el que bucólicos campesinos, jóvenes enamoradas y apuestos galanes,
nos acompañan hasta el bosque nocturno donde habitan las wilis, esos espíritus de muchachas muertas antes de casarse, mientras las voces del viento susurran versos del poeta español.
Con el maestro Óliver Díaz al frente de la Orquesta Titular del Teatro Real, y el magnífico el elenco de la CND, las funciones contarán con la presencia de la bailarina ucraniana Katja Khaniukova, Primera Solista del English National Ballet, como invitada especial en las funciones del día 20 y del 21 (a las 21.00 horas), en la que dará vida a la protagonista junto a Joaquín de Luz y Alessandro Riga, respectivamente.
Las representaciones serán especiales para las bailarinas acogidas por la CND, procedentes del Ballet de la Ópera Nacional de Ucrania e integradas actualmente en el programa de Talento Emergente de la CND, ya que tres de ellas participarán en los elencos que actuarán en el Teatro Real: Anastasiia Hurska, que será bailarina principal e interpretará el rol de Myrtha en una de las jornadas y el paso a dos del Pas de Paysan en otras dos representaciones, y Yelyzaveta Semenenko y Kateryna Chupina, como parte del cuerpo de baile en el papel de wilis.
Foto: Ignacio García-Belenguer (director general TR), Trinidad Vives (asistente coreográfica de la CND), Borja Ortiz de Gondra (dramaturgo), Joaquín De Luz (director de la CND) y Joan Matabosch (director artístico TR) / © Javier del Real - Teatro Real