La ópera Carmen, de Georges Bizet, se representará escenificada en Pamplona este viernes, día 2, y el domingo 4 de febrero de 2024, dentro de la Temporada de abono 2023-2024 de Fundación Baluarte, en colaboración con la Asociación Gayarre Amigos de la Ópera de Navarra (AGAO). “Uno de los aspectos más destacados de esta producción es su inteligente forma de combinar tradición e innovación, que se muestra tanto en la visión del equipo técnico como en los aspectos más visibles para el público”, ha asegurado el director de la Fundación, Rubén Jauquicoa, durante la presentación del espectáculo a los medios de comunicación.
Junto con él han intervenido en la rueda de prensa Audrey Saint-Gil, directora musical; Jean-Louis Grinda, director de escena (quien ha hablado a través de un vídeo); Ketevan Kemoklidze, quien interpretará el papel de Carmen, y Alejandro Roy, quien dará vida a Don José.
Rubén Jauquicoa ha señalado que compartirán escenario 170 personas, entre el elenco, los coros, la Orquesta Sinfónica de Navarra y la figuración. “Hacer posible la representación de un espectáculo tan ambicioso a un precio asequible para el gran público no sería posible sin el compromiso de Gobierno de Navarra”, ha apuntado. Asimismo, ha resaltado que la positiva respuesta del público hace que “el esfuerzo económico y organizativo merezca la pena”, ya que las entradas de las dos funciones -más de 3.000- están agotadas desde hace días.
El director de Fundación Baluarte ha mencionado que representar Carmen en Navarra “siempre es especial” porque la novela de Prosper Merimée en la que está basada la ópera “está salpicada de numerosas referencias a nuestra Comunidad”. Ha resaltado, además, que otro de los vínculos de la producción con este territorio son los cinco navarros del elenco: los solistas Andrea Jiménez, Nerea Berraondo, Andoni Sarobe e Igor Peral, así como el actor Xabier Olza. “Esto demuestra el compromiso de la Fundación por promover y visibilizar el talento local”, ha dicho.
Por su parte, Jean-Louis Grinda ha manifestado su visión del personaje como “una víctima de Don José”, no como una “mujer malvada”, como en ocasiones se la ha retratado. “Él es un hombre que vive preso de su propia violencia y se cruza con una mujer excepcional. Cree que por amarla va a ser suya para siempre. Pero sabemos bien que nadie pertenece a otra persona”, ha sentenciado.
Con respecto a la puesta en escena, ha comentado parece tradicional, pero en realidad es muy moderna: “Buscaba una Carmen histórica, con un vestuario que fuera como el de la época. Pero a la vez quería un decorado ligero y sofisticado, que hiciera pensar en todos los lugares que aparecen en el argumento”. Así, ha apostado por un escenario desnudo, con grandes paredes que se desplazan para crear espacios como la calle, la plaza de toros, la taberna… “Es muy fluido y busca ser explícito para el público sin resultar tradicional”, ha indicado.
La directora musical, Audrey Saint-Gil ha establecido un paralelismo entre la tragedia griega y Carmen: “En la primera, el coro tenía todas las claves de la historia, sabía qué va a ocurrir, describía la historia. En esta ópera no es el coro, sino la orquesta”. Así, ha explicado que desde la obertura el público puede conocer todos los elementos del drama: la muerte de Carmen, la pelea, el amor… “Si prestamos atención, podemos escuchar todo esto”.
Con respecto al trabajo con la Orquesta Sinfónica de Navarra, ha destacado que ha sido una experiencia muy satisfactoria para ella: “Los músicos han tratado de comprender la visión que tengo, lo que es clave. No puedo imponerles nada; debo ver sus fortalezas y tenemos que trabajar juntos. Hasta ahora no solo han completado mi visión, sino que han dado mucho más”.
En cuanto a los aspectos más destacados de la producción, ha considerado que aparte del “fantástico elenco”, el elemento “mágico” es Irene Olvera, la bailaora de flamenco. “Impacta ver esa concentración en una persona tan joven. Acaba de cumplir 16 años y puede darnos a todos lecciones de carisma y de poder mental”, ha apostillado.
Ketevan Kemoklidze ha expresado que, para ella, “Carmen es una mujer libre, con ganas de vivir y de vivir como imagina”. Ha apostillado que lo que más le atrae de la protagonista es “su alegría, vitalidad y fuerza, así como su independencia”. En ese sentido, ha recalcado que su deseo “no es solo cantar, sino también interpretar el papel de la novela de Mérimée”, ya que encuentra “muchos aspectos interesantes” en el personaje, “más allá de la interpretación vocal”.
Alejandro Roy ha explicado que para meterse en el papel de Don José ha tratado de comprenderle: “Jean-Louis Grinda me dijo que no lo viese como un pobre hombre que se deja arrastrar, sino como un volcán dormido a punto de estallar”. También ha ahondado en las diferencias culturales entre el norte y el sur, ya que “Don José, de origen navarro, no logra entender la mayor libertad que encuentra en ese momento entre los andaluces”.
Dos conferencias previas a las funciones, con acceso libre
El quinto espectáculo de la Temporada de abono 23-24 de Fundación Baluarte en el Auditorio Baluarte es una producción de la Ópera de Monte-Carlo, en coproducción con el Teatro Capitole de Toulouse y la Ópera de Marsella. Participarán la Orquesta Sinfónica de Navarra; el Coro Lírico AGAO, bajo la dirección de Íñigo Casalí; y la Escolanía del Orfeón Pamplonés, dirigida por Juan Gainza.
El reparto está encabezado por la mezzosoprano Ketevan Kemoklidze, quien interpretará el papel de Carmen, y por Alejandro Roy, en el rol de Don José. Simón Orfila dará vida a Escamillo; Berna Perles, a Micaela; Nerea Berraondo será Mercedes y Andrea Jiménez, Frasquita. Completan el elenco David Lagares como Zúñiga, Andoni Sarobe como Morales, César San Martín como El Dancairo, Igor Peral como El Remendado, Xabier Olza como Lillas Pastia e Irene Olvera como bailaora de flamenco.
Carmen es la ópera francesa más representada de la historia del género pese al fracaso de su estreno. Concebida por Georges Bizet para la Ópera-Comique de París, el autor quiso romper con las buenas y amables costumbres del estilo cómico para acercarse a las pasiones prohibidas del ser humano. Ambientada en una Sevilla agitanada de taberna y amor libre, su inmortal historia de amor, celos y traiciones acabó por conquistar al público mundial y universalizar el arquetipo latino de la femme fatale.
Como antesala a cada una de las funciones, la sala Gola del Auditorio Baluarte acogerá dos conferencias previas, para poner el contexto de esta ópera. El viernes 2 de febrero a las 18:30 intervendrá ensayista musical Juan Manuel Vela del Campo y el domingo, la charla correrá a cargo de Luis Miguel Alonso a las 17:30. El acceso a ambas citas es libre hasta completar aforo.
Foto: equipo artístico para Carmen / © Iñaki Zaldúa