Esta VIII edición de “Todos creamos” se titula “El manuscrito indescifrable”
Casi un centenar de estudiantes con edades comprendidas entre los 8 y los 21 años, pertenecientes a últimos cursos de Primaria del Colegio Público "Joaquín Blume" de Torrejón de Ardoz, a la ESO del Instituto Superior "Valle-Inclán", también de Torrejón de Ardoz, y alumnos del Centro Público de Educación Especial "Infanta Elena" de Madrid, estrenarán mañana martes 28 de mayo en la Sala Sinfónica del Auditorio Nacional su obra "El manuscrito indescifrable", tras ocho meses de intenso trabajo. En el escenario estarán acompañados por la Orquesta Arcos-Iuventas y el proyecto cuenta con la colaboración del Real Conservatorio Superior de Música de Madrid, el Conservatorio Superior de Danza “María de Ávila” y la Universidad Autónoma de Madrid. La parte musical del espectáculo está compuesta por música original de los escolares inventada e inspirada en Stanley Kubrick, Ray Bradbury o en el movimiento Dadá. Sus poesías indescifrables sonarán junto a fragmentos de obras de Holst, Debussy, Llivre Vermell y Messiaen. Junto a ello, coreografías suscitadas por los propios dibujos del manuscrito, proyecciones de arte, lenguajes, naturaleza y “sibilas” de la historia.
"El manuscrtio indescifrable" es la octava obra creada a mil manos dentro de "Todos creamos", proyecto pedagógico del Centro Nacional de Difusión Musical (CNDM). Esta iniciativa permite a los escolares participar de forma activa en la creación de una obra musical y coreográfica desde el inicio con la coordinación artística del compositor, pedagogo y comunicador musical Fernando Palacios. El proyecto es una apuesta consolidada del CNDM por el fomento de la creación artística y de nuevos públicos entre la infancia y juventud y se une a las 52 actividades educativas en 11 ciudades españolas y 3 extranjeras, en coproducción con 16 instituciones académicas.
Inclusión y enigmas
En las pasadas ediciones de este proyecto pedagógico se inició el camino de la inclusión con la participación activa de estudiantes del Colegio Público “El Sol” de Madrid, un centro que sigue una filosofía bilingüe lengua de signos/lengua castellana, con alumnos sordos y oyentes. El éxito de la propuesta artística hizo que el año pasado se decidiera apostar de nuevo por fomentar el trabajo artístico entre escolares con diversidad funcional, camino que continúa este año con el Centro Público de Educación Especial “Infanta Elena”, del que participan 14 jóvenes con necesidades educativas especiales derivadas de discapacidad permanente, que forman parte del elenco artístico de alumnos que interpretará la obra final. Según Fernando Palacios, coordinador del proyecto: "El principio es la interdisciplinaridad: música, movimiento, danza, plástica, literatura, construcción, arquitectura, dramatización... Todo se crea desde unos puntos iniciales; a partir de ahí, escuchando al otro y fomentado relaciones sociales, se va perfilando el espectáculo. No hay guetos, sino que es el propio colectivo el que realiza e interpreta el trabajo."
Como eje central de este viaje solidario y artístico, Palacios ha elegido este año el misterioso y sugerente manuscrito Voynich: "En este mundo repleto de enigmas indescifrables, hay dos que nos excitan principalmente: el funcionamiento de la mente de los adolescentes y las reacciones insólitas de los niños. Esa es la razón por la que los puntos de partida de nuestros proyectos emergen de esos territorios pantanosos. En ediciones anteriores, hemos podido constatar cómo nuestro heterogéneo y cambiante equipo (niños, jóvenes, universitarios, monitores, jubilados, artistas diversos...) reflexionaba sobre la burbuja inmobiliaria de Babel (2014), se indignaba con la devastadora ambición de Kaos (2015) y las pateras sin rumbo de los mares de Ulises (2016); le hemos visto solidarizarse con los refugiados de los infiernos de El Bosco (2017) y entrar sin prejuicios en el lenguaje simbólico de las esculturas de Bomarzo (2018). Este nuevo proyecto nos invita a adentrarnos en códices antiguos cargados de códigos que retan a quien los abre.
Uno de ellos nos ha dado la primera pista: el único manuscrito medieval no descifrado que queda en el planeta: el Manuscrito Voynich, un desconcertante acertijo literario. Cien estudiantes en la Sala Sinfónica del Auditorio Nacional (niños, adolescentes, discapacitados, universitarios e instrumentistas) embebidos en un proyecto educativo e iniciático bajo una misma consigna: crear un espectáculo al filo de lo imposible. “Todos creamos” (CNDM) funciona a contracorriente y se organiza en torno a la integración de las artes con el empeño de entrar en terrenos desconocidos, caminar en la incertidumbre de la creación, romper la rutina y despertar al mundo. En el escenario, orquesta, piano, órgano, percusión, máquinas de ruido escénico (creadas por el gran escenógrafo Miguel Ángel Coso), instrumentos de deshecho, telas pintadas, vestuario, coreografías, cantos, danzas, teatro, movimiento, luces, pantalla… (si hay algo útil en la enseñanza es el escenario). Objetivo, alumbrar a través de las artes diluidas aquello que la ciencia no ha conseguido todavía: el desconcertante códice Voynich, único manuscrito que queda por descifrar en el planeta, un acertijo literario del s. XV que parece hecho a nuestra medida."
Fernando Palacios (Castejón, Navarra, 1952) es pedagogo musical, creador de grupos musicales, director y presentador de programas de radio y televisión (Música sobre la marcha, Tira de música, Sonido y oído, El oído atento); compositor de obras de concierto, ballets y óperas; escritor de libros de recursos y profesor en Universidades, ha dirigido Radio Clásica (RNE) entre los años 2008-10. En 1992 puso en marcha el Departamento Educativo de la Orquesta Filarmónica de Gran Canaria. Esta iniciativa pionera se extendió poco a poco por toda España y Latinoamérica, con especial incidencia en Navarra y en la publicación de las colecciones de cuentos musicales La mota de polvo y Paisajes musicales en Agruparte. Palacios trabaja en los proyectos educativos del Teatro Real, CNDM, Comunidad de Madrid y Fundación Juan March, e imparte el curso permanente El arte de escuchar en la “Escuela de Música Arcos” (Madrid) y en “Música, Arte y proceso” (Vitoria).
Descarga de la guía didáctica
http://www.cndm.mcu.es/node/21174
Foto: Esta VIII edición de “Todos creamos” se titula “El manuscrito indescifrable”.