Uno de los títulos más bellos del repertorio barroco, Dido & Aeneas, vuelve al Gran Teatre del Liceu del 17 al 22 de junio con 5 funciones (el día 16 de junio se incluye una función más exclusiva para el público Under35). Se trata de una nueva coproducción del Gran Teatre del Liceu dirigida por Blanca Li. La coreógrafa granadina ofrece su particular versión de este título que otros coreógrafos contemporáneos también han revivido.
Hacía 76 años que no se representaba en el Gran Teatre del Liceu, donde se estrenó el 14 de enero de 1956 con tres funciones. En aquella ocasión, el maestro Joan Magrinyà, director del Ballet del Gran Teatre del Liceu, firmó las coreografías de las danzas. El estreno absoluto de la ópera de Henry Purcell se remonta al año 1689, en la residencia escolar para niñas de Josias Priest de Chelsea (Londres). Se basa en un libreto del poeta irlandés Nahum Tate (1652-1715), que se inspira a su vez en Dido, reina de Cartago, de Christopher Marlowe, escrita a partir del canto IV de la Eneida de Virgilio.
Sobre la producción
Blanca Li dirige esta nueva coproducción del Gran Teatre del Liceu, los Teatros del Canal —donde se estrenó el 17 de enero de 2023 y que Blanca Li dirige desde 2019—, el Théâtre Impérial de Compiègne, le Château de Versailles Spectacles y Les Arts Florissants, y con la colaboración del Teatro Real. Con una propuesta completamente coreografiada de Dido & Aeneas, Li sitúa la danza y la ópera a un mismo plano, al tiempo que respeta la esencia lírica de la obra. Así, establece un diálogo entre una música de otro tiempo y las técnicas de interpretación contemporáneas. Para empezar, la directora respeta la partitura de Purcell interpretada por un conjunto de cantantes e instrumentistas especializados en música antigua que interactúan todo el rato con los bailarines de la Compañía Blanca Li.
Cantantes y bailarines comparten la narración en una propuesta que recupera al fin el espíritu originario de este título barroco, que exigía que los cantantes tuvieran aptitudes para actuar y bailar, especialmente los que se dedicaban al repertorio de influencia francesa. El cuerpo, en este caso, se consideraba un elemento expresivo fundamental y se trabajaba a fondo la gestualidad. El resultado es una coreografía que se vertebra orgánicamente como un todo móvil y compacto. Los cuerpos y los gestos de los bailarines, que se desarrollan en un plano inferior, encima de una fina capa de agua, refuerzan la representación de los afectos interiores de los protagonistas: pasión, ruptura interna, alegría o tristeza, entre muchos otros.
Blanca Li afirma que "el libreto de esta ópera, creado por el poeta irlandés Nahum Tate, está despojado por su autor de peripecias, con el objetivo de otorgar a la música de Purcell su pleno poder evocador. Eso me ha permitido una gran libertad a la hora de crear. Me he centrado en favorecer la emoción, y destacar por medio de la danza todo aquello que el libreto y la música no llegan a explicar".
La artista visual alemana Evi Keller firma una escenografía abstracta y simbólica que se combina con la iluminación gráfica de Caty Olive. Genera una atmósfera intimista que gira en torno a los elementos del agua, la luz y la piedra, dado que muestra a los personajes como anclados en el suelo, como si fueran esculturas, en una inmovilidad que contrasta con la evolución de los bailarines a su alrededor.
Por su parte, William Christie, padre del movimiento historicista y auténtico especialista de la música del Barroco europeo, dirigirá en el Liceu su formación Les Arts Florissants para ofrecer un espectáculo con una fuerte carga emotiva. Christie y Li ya habían trabajado juntos para montar la ópera barroca Les Indes Galantes, de Rameau, en 1999.
En palabras de Christie, "si hay una obra icónica de Purcell, es Dido & Aeneas. Esta miniópera, que no se sabe si está inacabada o no, es sin duda la obra más conocida de todo su repertorio; la prueba es que durante años se ha representado en teatros de todo el mundo, generalmente en versiones de concierto. No conozco ninguna otra música que consiga crear una atmósfera tan dramática y extraordinariamente viva en una duración tan corta. El final, en particular, es una de las arias barrocas más famosas; pero, sobre todo, es universal. Desde el aspecto puramente personal, es una obra que me acompaña desde hace sesenta años o más, con la que me voy a cruzar muy pronto en mi carrera".
En cuanto a los cantantes, la soprano norte americana Kate Lindsey será Dido, mientras que el barítono italiano Renato Dolcini dará vida al rey de Troya, Eneas y Ana Vieira Leite, Belinda. Cierran el cast Maug Gnidzaz, Virginie Thomas, Jacob Lawrence, Michael Loughlin Smith, Bastien Rimondi, Padraic Rowan y Daniel Brant.
Foto: Blanca Li y William Christie.