Los tres “bocetos sinfónicos" titulados “La Mer” por el propio Claude Debussy, sirvieron de conmemoración para el centenario del fallecimiento en el tercer concierto de la Serie de abono “Djanira” de la veterana Orquestra Petrobras Sinfônica.
Piedra de toque para cualquier formación orquestal que abre paso a los lenguajes contemporáneos del S. XX, “La Mer” se erige como un extenso tratado de instrumentación en el que las constantes acotaciones nos sumergen en una estética impresionista que utiliza temáticamente el mar para desarrollar una partitura llena de efectos y juegos sonoros.
La OPES se desenvolvió con soltura, tanto en la calma como en las tempestades de la partitura, debido a la plena comunicación entre músicos y maestro que reportó una versión nítida, transparente y prestando cuidadosa atención a cada detalle que el maestro español Francisco- Valero-Terribas moldeaba con expresividad y clarividencia desde el podio.
La ópera “Piedade”, reciente encargo de la propia OPES al reconocido compositor carioca J. Guilherme Ripper, gira en torno al asesinato del escritor Euclides de Cunha acontecido en el barrio de Piedade que propiamente intitula tanto la propia ópera como la Suite Sinfónica objeto de estreno. En esta Suite, el maestro Ripper presenta algunos de los momentos álgidos de la partitura con sus siempre cuidadas instrumentaciones.
Encontró, felizmente, una complicidad en la batuta del maestro español que consiguió extraer de los músicos de la OPES momentos llenos de sensibilidad y exquisito trato melódico como los de la magistral aria “É preciso morrer”. Sin duda, un nuevo éxito en cada reposición de esta partitura que se extiende por todo el continente.
Cármelo de los Santos es un violinista temperamental. Afrontó con valentía el siempre incómodo Concierto en Re mayor Opus 35 de Erich Wolfgang de Korngold. Obra nutrida de las principales escuelas tardorománticas europeas que encuentra en la pluma de Korngold una particular sensibilidad por las cuidadas instrumentaciones repletas de efectos texturales.
Es sin duda una muestra más de la trascendente labor que bajo la dirección artística del legendario maestro Isaac Karabtchevsky viene desarrollando la Orquestra Petrobras Sinfônica con un público que irrumpió con innumerables aplausos una jornada memorable bajo las órdenes de Valero-Terribas, quien repetía en el podio tras una calurosa acogida la pasada temporada. Nombres de alta escuela en un concierto para recordar.
Crónica de Leonardo Matos. 17-VIII-2018.
Foto: Valero-Terribas y la Orquestra Petrobras Sinfônica.