En este CD, con el que Alfonso Romero Asenjo inicia su colaboración en la colección "Classics from Spain" de Naxos, nos encontramos con tres obras destacadas del compositor. Sinfonía de cuerdas, que muestra una marcada inquietud cinematográfica; Concierto para violonchelo, que enfrenta frases melódicas luminosas y extendidas del solista contra una densa oscuridad desde la orquesta; Concierto para dos violines, del que podríamos decir que es homenaje a la obra J.S. Bach, dotando a los recursos barrocos de una misteriosa y atractiva modernidad, todo ello dentro de ese hilo conductor de su carrera en el que se distingue un anhelo de espiritualidad dentro de la vanguardia musical.
Alfonso Romero Asenjo
Conciertos y obras para cuerda
Cello Concerto, Concerto for Two Violins
String Symphony
Iagoba Fanlo, Cello / Sergey Teslya, Violin
Joaquín Torre, Violin / Cammerata Orchestra
Naxos 8.579044 (CD)
Ean: 0747313904471
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Anhelo de espiritualidad en la vanguardia
Bien entrada la segunda década del siglo XXI - cuando ya comprobamos que no estamos en una era de cambios, sino en un cambio de era - la creación musical se mueve desde hace muchos años más allá de la vanguardia que, en España, tuvo un hito en la llamada Generación del 51. Nuevas propuestas que, en el caso de Alfonso Romero Asenjo (1957) se materializan en una trayectoria llena de premios y distinciones. Estas subrayan una esencial preocupación por un lenguaje musical del que no está ausente un anhelo de espiritualidad muchas veces olvidado en la creación contemporánea.
Poseedor, sin duda, de un lenguaje inconfundible, muy particular, quizá podríamos calificar su obra como “transvanguardista”. En tanto que “no está ni más acá de la vanguardia ni más allá tampoco, sino que la tiene en cuenta, la conoce, la valora, la usa eventualmente si la necesita y se mantiene en unos límites de lenguaje que le son propios”, en palabras de Tomás Marco referidas en este caso a su mentor, el sevillano Manuel Castillo, pero que le vienen como anillo al dedo a Romero Asenjo.
La Sinfonía de Cuerdas es la obra más reciente de las cuatro que integran esta grabación. La estrenó la Orquesta de Cambra Catalana en 2014 en el exquisito auditorio de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Consta de tres movimientos y comienza con un movimiento ascendente de las cuerdas, que progresivamente irá alcanzando gran agitación. Tan solo en momentos dispersos se aplaca la inquietud, aunque la composición culmina con una conclusión en pianissimo, a diferencia de la sinfonía clásica. El compositor nunca ha ocultado su pasión, tanto intelectual como creativa, por el séptimo arte y su vertiente sonora. Ello se refleja a lo largo de su producción, de la que nos es a veces imposible disociar imágenes visuales que nos vienen a la cabeza y que vienen a ser así como fogonazos que iluminan una realidad no por incierta menos atractiva.
El Divertimento fue concebido como un encargo para orquesta juvenil y fue estrenado por la Orquesta del Conservatorio Superior de Córdoba en 1995. Más adelante lo han interpretado numerosas orquestas juveniles debido a su relativa facilidad de montaje y su carácter directo. El tercer tiempo, un vivo fugato,, contrasta con dos tiempos anteriores de carácter meditativo, impregnados de densa inquietud.
El turbador Concierto para violonchelo y orquesta de cuerda, compuesto inicialmente para una formación de cuerdas (que es la que escucharemos en este disco), se estrenó sin embargo en versión de orquesta sinfónica en 1996, a cargo de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla, con Álvaro Campos como chelista y Gianandrea Noseda como director. El ambiente denso y oscuro de las cuerdas precede a las apariciones del violonchelo, que ilumina la composición con sus frases largas, casi constantemente hilvanadas, de fuerte componente melódico.
Por último, el Concierto para dos violines y orquesta de cuerda contó con la dirección del compositor en su estreno, en 1991, con la Orquesta de Córdoba. Está concebido, en parte, como un homenaje al Concierto para dos violines de J. S. Bach, en esa línea de “música sobre músicas” tan frecuentada en el S. XX. En consecuencia, la obra juega con los recursos del concierto barroco, como el fugato o la melodía sobre bajo continuo, dotándolos, a través de la armonía moderna y las frecuentes disonancias, de una misteriosa y atrayente modernidad.
Por Hertha Gallego de Torres
Foto: Alfonso Romero Asenjo