La Italia más pasional regresa a la escena bilbaína con la sesión doble de Cavalleria rusticana y Pagliacci, una producción propia y voces de primera. Amor, honor, celos, venganza y un final trágico, conviven en las dos óperas veristas, ambientadas en el sur de Italia y famosas por sus célebres melodías.
Los días 20, 23, 26 y 29 de noviembre en el Euskalduna Bilbao, las funciones darán comienzo a las 19:30h salvo la del sábado 20 que comenzará a las 19:00h.
VERISMO EN ESTADO PURO
Cavalleria rusticana ofrece una síntesis perfecta de melodía y fuerza dramática. Su estreno fue un éxito rotundo y Mascagni tuvo que salir a saludar en 40 ocasiones. Pagliacci, también estrenada con gran éxito, debe su fuerza a la intensa pasión de un lenguaje musical que exhibe momentos de gran fuerza enlazados con otros de melódica sutileza. Leoncavallo utiliza en esta ópera conceptos de La Comedia dell’Arte y el recurso del teatro dentro del teatro.
Las dos óperas suelen representarse seguidas por su temática y ambientación, pero también por pertenecer a la misma corriente: el verismo. Cavalleria rusticana se considera como la ópera fundacional del género verista en la música. La Giovane scuola italiana, de la que formaban parte Mascagni, Cilea, Leoncavallo, Giordano, Puccini y otros, propuso una renovación en sentido realista de la ópera lírica. Se trata de reflejar problemas socioculturales de la vida cotidiana, y los protagonistas son personas corrientes, del pueblo, con un lenguaje directo y llano.
Dos historias brutales y a la vez conmovedoras, con un cierre dirigido directamente al espectador, a quien la historia llega como un verdadero retazo de vida: celos, infidelidades, venganza, pasiones demoledoras, miedo, ofensas, personajes sencillos, importante presencia de la religión, y sobre todo, crudo realismo sobre una lacra que sigue vigente: la violencia de género.
UN REPARTO DE GRANDES VOCES
Destacan las voces protagonistas de estas dos historias turbulentas, con un reparto encabezado por Jorge de León, quien afronta el agotador reto que supone cantar los papeles de Turiddu y Canio en la misma función, con la extraordinaria fuerza expresiva que ambos roles requieren. Todo un desafío para el talento vocal, actoral y la solvencia escénica del tinerfeño, gran figura mundial en su repertorio.
De León comparte protagonismo en la ópera de Mascagni con Ekaterina Semenchuk, una mezzosoprano de enorme inteligencia vocal y de referencia en el dramático rol de Santuzza; el siempre brillante barítono Ambrogio Maestri como Alfio, Belén Elvira, que debuta en ABAO como Lola, y la legendaria mezzosoprano Elena Zilio como Mamma Lucia.
Por su parte en Pagliacci, Rocío Ignacio regresa a Bilbao con el papel de Nedda, un personaje complejo, exigente y lleno de peso dramático. La soprano sevillana, se reencuentra con el público bilbaíno, después del exitoso recital del ciclo ABAO on Stage. Cierran el elenco de la obra de Leoncavallo, el barítono Ambrogio Maestri que también culmina doblete operístico en ABAO como Tonio, Carlos Daza con el rol de Silvio, el tenor bilbaíno Mikeldi Atxalandabaso como Beppe y el barítono Gexan Etxabe como Un contadino.
DANIEL OREN DEBUTA AL FRENTE DE LA EUSKADIKO ORKESTRA
El maestro Daniel Oren se pone al frente de la Euskadiko Orkestra para afrontar dos partituras llenas de violencia y tensión dramática, escenas muy conocidas y momentos de gran detalle orquestal, especialmente en Pagliacci, que requieren el pulso, la personalidad y la elegante batuta del maestro israelita.
Musicalmente ambas obras están llenas de color, la primera con música más cercana, pegadiza y tradicional, y la segunda más elaborada y sinfónica. Ambas con brillantes escenas corales para el Coro de Ópera de Bilbao y la colaboración en Pagliacci del coro infantil de la Sociedad Coral de Bilbao.
UNA PRODUCCIÓN DE INSPIRACIÓN CINEMATOGRÁFICA
En el escenario una producción de ABAO Bilbao Opera concebida por Joan Anton Rechi, con ritmo cinematográfico y ambientada en un pueblo mediterráneo. Rechi enlaza hábilmente las tramas de las dos óperas como si fueran dos capítulos de una misma historia dominadas por los instintos más primarios: celos, infidelidades, pulsiones obsesivas y asesinatos. Albert Estany es el director de la reposición en Bilbao.
El planteamiento escénico abunda en las características y personalidad de los personajes para desarrollar el aspecto dramático y perturbador de ambas historias, con una escenografía de Gabriele Moreschi de corte clásico e intimista, realzada por la iluminación de Alberto Rodríguez y un soberbio vestuario de Mercè Paloma.